La Policía Local de Motril rescató la tarde del miércoles a un bebé de dos años que se había quedado atrapado en el interior del coche de la responsable del menor al cerrarse el vehículo y quedarse las llaves dentro por accidente.

Según fuentes policiales, sobre las 12:40 horas recibían una llamada pidiendo ayuda ya que un menor se había quedado encerrado en el interior de un turismo en el que llevaba ya unos 15 minutos encerrado.

Hasta el lugar se desplazó una patrulla de la Policía Local que, tras comprobar que el bebé se encontraba sudando y con síntomas de clara deshidratación tras llevar un cuarto de hora en el interior del vehículo, al sol y a unos 32 grados, tuvieron que romper el cristal delantero para abrir la puerta y sacarlo.

Los agentes hidrataron al pequeño mientras llegaron los servicios sanitarios, y tranquilizaron tanto al menor como a familiar de este.

Durante la época estival los coches pueden alcanzar altas temperaturas, que sobrepasan a las exteriores, lo que puede provocar graves consecuencias, e incluso la muerte, en menos de una hora. Desde las distintas administraciones piden prudencia todos los años y ponen el foco en los niños, al ser más vulnerables al calor.