Motril cambiará de ubicación su obelisco y colocará un nuevo elemento inspirado en la popular ‘fuente de la bola’

La isleta situada en la intersección de las calles Cuevas y López Rubio cambiará próximamente su fisionomía con el traslado del obelisco de 20 metros de altura que lleva cerca de dos décadas saludando a los vecinos y visitantes que transitan por esta zona de la ciudad, para dar paso a otro elemento ornamental inspirado en la popular 'fuente de la bola'.

El cambio se producirá el próximo miércoles 1 de octubre, momento en el que los motrileños dejarán de ver a este coloso, que será retirado momentáneamente para su restauración, y en su lugar se instalará otro adorno "más acorde" con el entorno.

Según apuntan desde el Ayuntamiento, se colocará un elemento urbano más proporcionado y en sintonía con el entorno, marcado por edificios de gran altura donde el obelisco no lucía adecuadamente. En concreto, el nuevo elemento que se instalará rendirá un homenaje a la histórica ‘fuente de la bola’, popularmente instalada entre los años 40 y 60 en La Posta, recuperando así parte de la memoria urbana y cultural de la ciudad. Tal y como han apuntado desde el área de Obras Públicas, la ejecución de este nuevo elemento estará contemplada en el presupuesto municipal de 2026.

La retirada del obelisco se llevará a cabo entre las 15:00 y las 21:00 horas del día 1 de octubre, durante la cual la calle Cuevas y la calle López Rubio permanecerán cerradas al tráfico, para garantizar la seguridad de los ciudadanos y del operativo de traslado.

Posteriormente, el obelisco será reparado y mejorado, incorporando iluminación LED, y reubicado en una de las rotondas de la entrada de Motril por las Ventillas, donde podrá ser apreciado en un entorno más adecuado a sus dimensiones y diseño y se convierta en un elemento de bienvenida a la ciudad.

El obelisco de 20 metros de altura se inauguró en diciembre de 2007 con la intención de simbolizar el carácter de ciudad europea meridional, según se apuntó en su momento en la inauguración. Con un peso de 20.000 kilos y planta piramidal, fue diseñado por el escultor Abelardo Espejo Tramblin y está fabricado en acero corten -donde el óxido protege al propio material- y cuenta con un sistema de luces laterales que realzará su aspecto durante la noche. Su colocación venía incluida en el proyecto de remodelación de la calle Cuevas para dar un mayor efecto visual al nuevo acceso a Motril proyectado en la carretera de Puntalón.