Perros, algún que otro gato y una cobaya en la bendición de animales por San Antón en Motril

Varios beagles, golden retriever o chihuahuas, con chalequitos, en carros o sin alejarse lo más mínimo de sus cuidadores... La Plaza de la Coronación de Motril se ha llenado este domingo de perros para celebrar la tradicional Bendición de Animales de San Antón, un evento que une el amor por los animales con la devoción. Multitud de vecinos del municipio no han querido perderse este encuentro promovido por la Asociación Amiko, el Ayuntamiento de Motril y la Iglesia Mayor de la Encarnación.

Un poco antes de la bendición, a cargo del párroco Don José Albaladejo, Brownie y Felipe, dos teckel -perros salchichas- se ponen a jugar tranquilamente para apuro de sus dueños que ven como las correas se acaban liando en un momento de confusión. Ricardo Rodríguez, un vecino de Motril, que ha aprovechado la ocasión para pasar la mañana junto a varios miembros de su familia en este evento, explica que este tipo de actos sirven para pasar momentos con un miembro más de la familia y han querido bendecirlo. "Para nosotros es uno más, te hacen compañía, están en los buenos y en los malos momentos, no te abandonan y son fieles. Así que me parece estupendo que tengan su día y su momento".

A unos metros se encuentra Marina García que junto a sus dos hijos ha venido para bendecir a Pepa, una pequeña yorkshire que lleva varios años con la familia y a la que han bendecido en un par de ocasiones. "Llevamos varios años participando en la bendición que se realiza por San Antón y colaborando con las acciones que hacen desde la asociación de animales, comprando las roscas o algún detallito para Pepa, y hemos estado viendo varios perros que han traído para adoptar, ahora mismo no estamos pensando en ampliar la familia, pero nunca se sabe".

Enfilando la una de la tarde, el párroco llega a la Plaza de la Coronación para iniciar las bendiciones, y los vecinos comienzan a formar una fila para que sus peludos sean bendecidos. Capri, Nando, Noah, Pistacho o Kira, poco a poco van pasando entre las risas de sus dueños que ven como algunos de ellos ponen caras extrañas al ser rociados con el agua bendecida.

El dueño de Nube pide al párroco que le quite un par de demonios, y al llegar Tristán el propio párroco ha pedido que le quite el genio que tiene, ya que lo conoce.

Aunque lo que más han predominado son los perros, también se han podido ver en la cola algún que otro gato, varios hámsteres y hasta una cobaya. Lorena Sabio, la dueña de Oreo -la cobaya-, señala que lleva algo más de un año siendo un miembro más de la familia. "Es la primera vez que venimos a este evento porque vimos el anuncio de la protectora de animales y dije, pues este fin de semana que está el niño conmigo, vamos a juntarnos y lo bendecimos mientras pasamos un rato agradable". Entre sus manos, Oreo se acurruca, mientras Lorena señala que es muy tranquilo, aunque el ruido le asusta un poco por lo que lo llevan en el transportín y tapado para que esté tranquilo.

La concejala de Participación Ciudadana, Inmaculada Torres, explica que un año más realizan este evento en colaboración con la Asociación Amiko, que se ha convertido casi en una fiesta a la que asisten multitud de vecinos de la localidad con sus mascotas. "Antes lo organizaba otra asociación, pero el Ayuntamiento siempre ha apoyado esta iniciativa porque, además de convertirse en una tradición", se ha convertido en la excusa perfecta para ayudar a las asociaciones. "A la bendición suelen venir todos los años más perros, pero también se ven otros animales, al final esto se ha convertido en un punto de encuentro al que gusta venir para participar en este día de fiesta". Además, Torres agradece a la Asociación Amiko que realice este tipo de actos.

Por su parte, la concejala de Salud y Consumo, Susana Peña, aprovecha el encuentro para hacer un llamamiento a los vecinos de la localidad para que censen en el Consistorio a sus perros para poder realizar acciones en favor de estos. "Es importante que los animales estén censados para actuar acorde a la población canina que hay en el municipio", en este sentido explica que a la hora de plantear parques caninos en la ciudad o solicitar ayudas a otras administraciones para realizar actividades o encuentros, es necesario conocer el número exacto de canes que hay en el municipio.