Vergonzoso. Así es como describen algunos usuarios de las playas del litoral granadino las pintadas que han aparecido en los últimos días en una pared de piedra del Paraje Natural de Cantarriján, donde se puede leer en letras grandes "Playa Nudista. Respeten", acompañado de tres flechas indicando la dirección a la segunda cala del enclave.

Unas pintadas que, desde la Asociación de Amigos de la Playa Nudista de Cantarriján (AAPNC) pusieron en conocimiento del Ayuntamiento de Almuñécar, a través de una denuncia ante el área de Medio Ambiente, para solicitar que se elimine la pintada del muro natural de roca.

La petición se trasladará a la Junta de Andalucía, institución autonómica competente al tratarse de un Paraje Natural, y que esperan actúen lo antes posible para eliminar esta pintada.

Desde la AAPNC explicaron a Granada Hoy que, pese a que la estancia nocturna en la playa no está permitida, "ni la pernoctación por ser Paraje Natural, ni por las restricciones Covid", las pintadas se tuvieron que hacer "sí o sí" por la noche, "es muy grande como para que nadie la hubiese visto realizar por el día".

Además, sospechan que "tanto por el sentido de la frase, como las flechas y el mensaje de respeten", lo tuvo que realizar un usuario no nudista de la playa, con la intención de mandar el mensaje de que "los que si lo somos, tenemos que quedarnos en la segunda cala de la playa y respetar a los textiles –como se refieren a los usuarios que usan trajes de baño- que están en la primera".

Y añadieron que "esa pintada no la haría un naturista, por el respeto medioambiental del que siempre damos ejemplo", e incidieron en que "por encima de todos, nosotros amamos esta playa".

Cantarriján se encuentra situada en una cala ubicada entre La Herradura, en Almuñécar, y Maro (Málaga) y consta oficialmente en el Gobierno Civil y en el Ayuntamiento de Almuñécar, desde 1982, como "Playa Nudista de Cantarriján", estando reconocida como tal por la Junta de Andalucía. 

En este sentido, desde la Asociación recalcan que el deterioro de un Espacio Natural Protegido está tipificado como infracción y, en el caso de lo ocurrido en Cantarriján, como grave por "la producción de impactos paisajísticos sensibles en los espacios naturales protegidos".

Un delito que puede acarrear multas económicas que van desde los 3.001 a los 200.000 euros.