El Covirán Granada pierde ante el Real Madrid (79-67) y certifica su descenso a Primera FEB

El Covirán Granada jugará la próxima temporada en Primera FEB. El equipo dirigido por Pablo Pin perdió este domingo por 79-67 En la cancha del poderoso Real Madrid y certifica su descenso a falta de una jornada para el final de la Liga Endesa.

Será intrascendente el partido del viernes contra el Morabanc Andorra en el Palacio. Sólo servirá para decir adiós a la elite, con dos salvaciones agónicas y casi milagrosas y un descenso no traumático porque se intuía desde hace tiempo. La derrota ante el Lleida de hace un par de meses inició la cuesta abajo del equipo, con mala suerte en las lesiones y refuerzos tardíos.

Tras dos semanas esquivando las matemáticas gracias a sus victorias, de este domingo ya no pasó. Se impuso la lógica y el Real Madrid, líder de la Liga ACB, venció por un claro 79-67 en un partido en el que los granadinos aguantaron tres cuartos pero se desinflaron en el último.

Pin, como era de esperar, descartó a Silverio, Clavell y Griffin, mientras que Chus Mateo dio descanso en el envite a Musa e Ibaka.

El partido empezó con ovación a Luka Doncic, invitado de honor en el partido, y con cada equipo fallando sus dos primeros ataques, racha cortada por un mate de Tavares para coger el Real Madrid la cabecera desde el principio.

De hecho, y para que nadie dudara de las mínimas, por no decir nulas, opciones nazaríes de victoria, el Covirán tardó cinco minutos en anotar su primera canasta (un triple de Noua), circunstancia que no aprovechó el Real Madrid para escaparse en el marcador (3-7).

Sólo Noua era capaz de anotar en el aro blanco, mientras que el equipo local fallaba en demasía y sólo hacía daño por mediación de Hezonja y de Tavares (14-5, 7’).

Las primeras rotaciones no mejoraron al Covirán Granada, aunque al menos Sergi García tomó el relevo anotador de Noua. Pin paró el partido por primera vez con 16-7 para evitar la escapada en el marcador del equipo rival.

El mate sobre la bocina de Rubén Guerrero no entró en tiempo, por lo que acabó 18-9 un primer cuarto dominado claramente por los locales ante un cuadro granadino muy atascado en ataque.

Bamforth se cargó de faltas (tres) al inicio del segundo cuarto, en el que se mantuvo la tónica del primero, ahora con Garuba y González haciendo mucho daño por dentro. Nuevo tiempo muerto de Pin con 24-12 porque el partido pintaba cada vez peor.

El parón no frenó la sangría (27-12, 13’ tras parcial de 7-0), aunque cuatro puntos seguidos de los visitantes (27-16) llevaron el choque a un nuevo tiempo, ahora de Mateo para mantener la intensidad de los suyos.

Volvió el apagón granadino en ataque, con varios triples fallados pese a estar solos los jugadores, y el Real Madrid aprovechó la coyuntura para empezar a sentenciar el choque con su máxima ventaja (33-16, 17’).

Un parcial de 0-6, aprovechando que los madridistas jugaban con su segunda unidad, dio aire al Covirán Granada (33-22), que trataba por todos los medios de agarrarse al partido con defensas alternativas y presión a toda pista.

Los de Pin estiraron el parcial al 1-11 (34-27) y Mateo, visiblemente enfadado, agotó su segundo tiempo libre. Se llegó al descanso con 36-27 tras una canasta de Tavares.

Ningún equipo mostró su mejor versión en el primer tiempo, en el que al menos no se fue del partido el Covirán Granada para afrontar la segunda mitad con opciones de plantar cara en el marcador pese a sus malos porcentajes en el tiro (33 por ciento de dos y 14 por ciento en triples).

La reanudación trajo la reducción de la diferencia a seis puntos gracias a un triple de Sergi García y la confirmación de que el Covirán Granada estaba en el partido gracias a un ganchito de Amine Noua, el mejor nazarí sobre la pista (39-34, 22’).

El Real Madrid daba la sensación de poder meter una marcha más cunado lo necesitaba (44-34), con Hezonja como lanzador de los veloces ataques blancos, pero el Covirán Granada estaba dispuesto a estar en el choque hasta el final (46-41, 25’ tras 2+1 de Sergi García).

Llull acertó para un Real Madrid fallón en el triple y Noua contestó con un mate a una mano en pleno intercambio de canastas que mantenía la renta cerca de los diez puntos (52-43, 28’).

Pin llamó de nuevo a los suyos a la banda, el equipo blanco volvió a apretar pero apareció Bamforth con cinco puntos seguidos para que el choque entrara sin sentenciar en el cuarto final (57-50).

El Real Madrid quería evitar por todos los medios un final de partido apretado y salió a pista en los diez últimos minutos decidido a sentenciar el duelo del todo, aunque el Covirán nunca se dio por vencido.

Se volvió a colocar seis puntos abajo el Covirán Granada tras el triple de Rousselle (62-56, 33’), afrente replicada por los blancos para cortar las alas granadinas (71-58, 36 tras triples de González y Hezonja).

El parcial local se estiró gracias a los tiros libres hasta el 73-58, quince puntos arriba con apenas tres minutos de partido para que el choque quedara sentenciado y, con ello, el descenso del Covirán Granada a Primera FEB.

Ficha técnica:

Real Madrid, 79 (18+18+21+22): Campazzo (5), Abalde (2), Hezonja ()21, Ndiaye (5), Tavares (11) -cinco inicial- Rathan-Mayes (2), González (13), Garuba (6), Llull (3), Feliz (6), Fernando (5).

Covirán Granada, 67 (9+18+23+17): Rousselle (11), Ubal (6), Valtonen (6), Noua (19), Bezhanishvili (2) -cinco inicial- García (11), Bamforth (8), Visconti (2), Aurrecoechea (2), Guerrero (0), Ndiaye (0).

Árbitros: Antonio Conde, Sergio Manuel y Raúl Zamorano.

Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 33 de la Liga Endesa disputado en el Movistar Arena de Madrid ante 6.800 espectadores.