Carlos de Cobos ejerce de capitán del Covirán Granada dentro y fuera de la pista. El base destaca destaca todo lo bueno que tuvo la primera parte de 2019 y no entra en eufemismos para explicar lo que le pasa al equipo esta temporada. La realidad es la que es y para el jugador el objetivo de cara a 2020 es cambiar la dinámica del conjunto que dirige Pablo Pin para hacer acopio de confianza. Meterse en el play off por el ascenso sigue siendo el objetivo.

¿Qué balance hace de 2019?

Tenemos que estar contentos con todo lo que hemos hecho en general en todo 2019. Ha sido el primer año en el que volvimos a LEB Oro, enganchamos a la afición y estuvimos a punto de meternos en una Final Four, algo que hubiera sido muy bonito. Ahora, a final de año no se ha dado tan bien, pero al fin y al cabo tenemos por delante bastante liga y margen de mejora, pues el equipo siempre trabaja para eso, para mejorar los resultados y estar lo mejor posible.

El base del Covirán, en acción.

Con qué momento se queda de 2019 y cuál querría borrar.

Creo que hubo varios buenos momentos porque hubo victorias como la conseguida ante Bilbao en el Palacio en los últimos compases del partido y también recuerdo la lograda ante el Palencia la temporada pasada en un encuentro que jugamos bien. En cuanto a lo que borraría, seguro que alguno de los partidos que perdimos por un punto en la eliminatoria contra Mallorca porque perder dos de los partidos del play off por sólo un punto fue bastante duro.

¿Qué fue lo mejor que tuvo el equipo de la pasada temporada?

Teníamos muchas cosas buenas. Éramos un equipo bastante coral en el que todo el mundo aportó y esto es lo que queremos mantener este año aunque todavía no hemos sido capaces. La verdad es que los resultados a veces generan presión y a veces cuesta. Pero tenemos tiempo para ver una mejor versión de este equipo que iguale a la del año pasado o incluso la mejore.

¿Qué le falta además al equipo de esta campaña en comparación con la pasada?

Creo que nos falta un poco más de alegría. Evidentemente las derrotas duelen pero tenemos que ser más positivos. Una dinámica que es peor que la del año pasado se nota mucho pues hace un año todo era muy bonito porque jugábamos casi sin presión y con todo a favor. Ahora mismo el viento está en contra y no podemos venirnos abajo. Hay que cambiar la vela y seguir para adelante.

¿Tiene alguna explicación esta diferencia en un equipo que prácticamente es el mismo de la pasada temporada?

Seguro que hay muchas explicaciones. Están los rivales, el hecho de que esta temporada ven al Covirán como un equipo más temible que el año pasado y se confíen menos. Lo importante para nosotros ahora es salir de la dinámica de lamentar las derrotas y esto cambia mucho en cómo juega un equipo. Basta con ver este año a Valladolid, que a veces gana partidos porque está en una buena dinámica y casi sin querer te ganan los finales de partido y esto porque están sin presión y saben que si pierden no pasa nada. También se puede explicar desde el hecho de que los equipos nos estudian más y también está en que esto es un deporte en el que necesitas tener acierto y si no lo tiene puedes perder cualquier partido en una liga igualada.

¿Cuál es el principal activo que ahora tiene el Covirán?

Creo que somos un grupo comprometido que siempre quiere lo mejor para el equipo. No hay nadie que piense individualmente dentro del conjunto. También tenemos a nuestra afición porque tener gente que te apoye sí o sí es importante, sobre todo ahora que las cosas van mal.

De Cobos es uno de los pilares del Covirán.

¿Cómo ve 2020?

Lo vemos bien. Tenemos que cambiar el chip, quedarnos con las cosas positivas, intentar sacar victorias, ojalá estemos en play off, a ver si la gente se vuelve a enganchar con nosotros y que todo vaya a mejor.

Entonces, en el plano deportivo sobre todo le pide al nuevo año que el equipo se meta en el play off.

Sí, evidentemente. Luego, todo dependerá de la dinámica que lleve el equipo, del estado físico, y se pude entrar hasta el último momento. Nosotros el año pasado lo hicimos en la última jornada y competimos mucho con un Mallorca que llegó a la final. Una vez que estás dentro, que es lo importante, puede pasar cualquier cosa.

El primer paso que hay que dar para cambiar la dinámica es acabar la primera vuelta de la mejor manera posible en los dos partidos que restan.

Hay que intentar cambiar lo antes posible. Cuanto antes lleguen las victorias será mucho mejor para el equipo.

Y hay que volver a ganar fuera, empezando por el partido de este viernes en Cáceres ante un equipo que no es el del año pasado.

Ni mucho menos. El Cáceres del año pasado se salvó en la última jornada y el de este año a pesar de haber perdido cuatro partidos seguidos está en zona de play off. Su juego es bastante mejor que el del año pasado.

¿Qué partido prevé ante el conjunto extremeño?

Será un encuentro muy igualado porque además allí en Cáceres la gente aprieta, el equipo se crece mucho y después de cuatro derrotas hay mucha necesidad. Será un partido bastante duro con tensión en ambas partes.

Y los dos equipos pensarán que hay que aprovechar el mal momento del rival.

Exacto. Ambos estamos pensando en eso, con lo que habrá dos equipos que mueran sobre la pista en pos de la victoria.

¿Cuál es el balance del año que hace Carlos de Cobos a nivel personal?

Creo que está bastante de acorde con el equipo. Pienso que cuando estoy bien se nota bastante en el equipo y cuando estoy peor el equipo se resiente. Mi objetivo es estar bien y aportar lo máximo para que el equipo vuelva a sumar victorias.