El Covirán Granada cortó su mala racha de resultados al lograr su segunda victoria de la temporada venciendo este domingo como local por 91-88 al Morabanc Andorra, rival directo por la permanencia que se queda en cuatro triunfos tras acumular tres derrotas consecutivas.

El Covirán basó su triunfo en el trío de 'pequeños' formado por Díaz, Costa y Thomasson lleva a los de Pin al triunfo ante un Andorra que dio guerra hasta el final pese a la temprana lesión de Tyson Pérez.

Tras una recuperación milagrosa anunciada por el club en la misma mañana del domingo, finalmente pudo ser de la partida Kairys pese a la lesión en el tobillo que se produjo el martes, aunque no en plenitud de condiciones físicas, se encargó de avisar la entidad. De hecho, estuvo disponible pero no jugó ningún minuto. Se apañaron por dentro entre Felicio e Iriarte.

El lituano empezó en el banquillo un choque que comenzó el Covirán Granada con dos triples seguidos de Cheatham, que ya era hora de empezar bien un partido.

Los problemas llegaron para Andorra, no sólo por empezar el partido por debajo sino por la lesión de Tyson Pérez, que tuvo que abandonar el partido dolorido, y ya no pudo volver a jugar más, tras poner el 8-4 en el marcador en el segundo minuto de juego.

Las defensas cambiantes ordenadas por Pablo Pin, defendiendo lo mismo en zona que en individual, ahogaron el ataque visitante, aunque lo mejor es que el equipo estaba sueltísimo en ataque, anotando con facilidad.

Tanto que Lekzano tuvo que parar el partido mediado el primer cuarto (16-6), con Tyson Pérez cabizbajo por no poder ayudar en una esquina del banco.

El rebote ofensivo y los triples de Montero daban oxígeno a los visitantes, aunque el Covirán seguía anotando con relativa comodidad, con dos triples seguidos de Costa (24-15, 8’).

Tras alcanzar los rojinegros su máxima diferencia del choque (28-15), un parcial de 0-5 permitió a los andorranos acabar el primer cuarto sólo ocho puntos abajo (28-20).

El Morabanc empezó entonado el segundo cuarto de la mano del estadounidense Jerrick Harding, tanto que se metió del todo en el choque con un parcial de 0-8 (30-28, 12’).

Los visitantes encontraron el camino del aro, pese a que Germán salió para tapar a Harding, y ahora era a Granada a quien le costaba más anotar (35-36, 15’).

Los peores minutos del Covirán Granada en el partido permitieron que Andorra se mantuviera por delante (41-43, 18’).

Salió al rescate Christian Díaz con varias canastas inverosímiles seguidas para que los locales acabaran el primer cuarto por delante 49-43 tras un parcial de 8-0.

Desenlace

El segundo tiempo arrancó de la peor forma posible: antideportiva a Tomás, triple desde su casa de Montero y dos canastas más en contra para el 0-9. La ventaja, al limbo (49-52).

Thomasson se echó al equipo a sus espaldas en el mal momento (58-56, 26’), bien secundado por Christian Díaz en la mejor actuación del canario en toda la temporada y por el acierto en el tiro libre de David Iriarte (65-58, 29’).

Un triple casi sobre la bocina de ‘Thor’ Díaz permitió al Covirán Granada entrar en el cuarto final ocho puntos arriba (68-60).

Kramer apareció a tiempo para anotar la primera canasta del acto final y dos tiros libres poner más oxígeno en el marcador (73-60).

Tomó el relevo anotador Díaz, que las seguía metiendo de todos los colores y de todos lados, para que el Covirán Granada empezara a encarrilar el partido (84-70, 35’).

Los visitantes trataron de agarrarse al choque con la aportación del croata Marin Maric (84-76 con menos de cuatro minutos por delante).

Y lo consiguieron porque completaron un parcial de 2-14 para entrar del todo en el partido (86-84 a falta de más de un minuto).

Sin embargo, Luz falló la canasta que les podía poner uno abajo y Thomasson no erró desde el tiro libre para que la merecida victoria se quedara en casa.