Fernando Alonso (Renault R29) logró en Estambul el objetivo mínimo, que era entrar en la crono 3 y luchar contra los mejores por el lugar más alto de la parrilla de salida, que será para el alemán Sebastian Vettel (RBR), en el GP de Turquía de hoy.

Pero, una vez más -y ya empieza a ser un clásico- el asturiano logró su objetivo por los pelos, que es tanto como decir que a Alonso le fue de milésimas entrar en el grupo de los diez más veloces, donde una vez más los Red Bull y Brawn GP, con Vettel y el líder del Mundial Jenson Button en la primera y Rubens Barrichello y Mark Webber en la segunda, coparán las dos primera líneas de la parrilla de Estambul.

Más allá de lo que pase en la carrera, Alonso, que partirá desde la cuarta línea, padece porque con su bólido, que en esta carrera tampoco monta el KERS, sufre demasiado para alcanzar los mínimos objetivos en un gran premio y teme que un día se caerá en la Q2, como ayer le ocurrió a su máximo rival en anteriores temporadas, como es el británico Lewis Hamilton, quien no pudo pasar ni el primer corte con su McLaren, con el que parecía que tanto él como Heikki Kovalainen podían empezar a dar un salto de calidad en Estambul.

Lejos de esto, al final se ha escrito en Estambul el relato que empieza a ser cansino en este arranque de Mundial; los Brawn GP y los Red Bull prueban durante el viernes, y el sábado acostumbran a ser los más rápidos, donde también se une Toyota, y últimamente Ferrari.

De esta forma, por segunda vez esta temporada, un Red Bull saldrá desde la pole, después de que Vettel lograra por segunda vez este año ser el más rápido. Junto a él estará el líder del Mundial, Button, quien con su Brawn GP espera que la cita sea otro paseo triunfal, como así ha sucedido en cinco de las seis carreras de este año, en las que el inglés ha sido el ganador. En la segunda línea se invierten los coches de la primera línea; así, el tercero será el Brawn de Barrichello y al lado tendrá el Red Bull de Webber.

Ante este panorama, parece improbable que en el circuito de Estambul se escriba la crónica del resurgir de los grandes equipos, aunque los dos Ferrari, tras un inicio de temporada aciago, ya empiezan a presentar sus opciones, con un sexto (Raikkonen) y un séptimo lugar (Massa), justo por delante de Fernando Alonso.

Pero lejos de este pequeño crecimiento de la escudería, y que cuente con el balance de tres victorias seguidas en Estambul (la tres de Massa, aunque en el año anterior ganó Raikkonen, pero en McLaren), nada parece que vaya a detener en Estambul la dictadura impuesta por los modestos.

Frente a esta previsión que se respira en el paddock, todo apunta que la victoria volverá a estar más cerca de los Brawn que de otra escudería y que en las opciones de frenar al equipo que nació de las cenizas de Honda, sólo hay cabida para Red Bull y los dos Toyota, después de otra buena actuación de Trulli, con el quinto mejor tiempo en la Q3.

El GP de Turquía, séptima prueba puntuable para el Mundial de F1, se celebrará este mediodía (14:00 horas) en el circuito de Estambul, en el que los pilotos deberán dar 58 vueltas, para completar 309,396 kilómetros.

En la previsión del tiempo, existe un riesgo casi nulo de que aparezca la lluvia en la carrera y no se espera mucho público, algo que ya se ha podido verificar en las tres jornadas previas, en las que la afición turca no ha respondido a la llamada de la Fórmula 1, un hecho que lleva cuatro años produciéndose.