Los Lakers sepultan a los Rockets y acceden a la final del Oeste

Los Lakers, un caso de estudio digno del Doctor Jekyll y Mr. Hyde, capaces de lo mejor y de lo peor, exhibieron su mejor cara en el duelo definitivo (4-3) frente a los Rockets de Houston (89-70), hoy muy inferiores, y disputarán la final del Oeste contra los Nuggets de Denver.

Como si de un déjà vu se tratase, los angelinos calcaron su actuación del quinto partido y ganaban por 25 poco antes del descanso (51-26). Para alcanzar esa tranquilidad fue clave un demoledor Pau Gasol, autor de 21 puntos y 18 rebotes, y un excepcional Trevor Ariza, con 15 tantos.

Como perros de presa. Agresivos hasta la extenuación en defensa, hábiles a la hora de recuperar balones e incisivos al máximo en ataque. Así salieron los Lakers, con un parcial de 8-0 que anunciaba la tormenta que esperaba a los Rockets. Luego, un 17-4 que hizo bajar las revuluciones al partido.

Antes de llegar al descanso la renta ya era superior a los 20 puntos (51-26). Para entonces los Lakers habían descubierto que meter balones al interior para Gasol.

El equipo de Phil Jackson no bajó el ritmo ni la intensidad defensiva en la segunda mitad del choque, gracias a la aportación de secundarios como Sasha Vujacic y Jordan Farmar, que ayudaron a mantener el hambre por la victoria.