El Madrid siempre es el Madrid: una gran cita

La familia de Pablo Aguilar se quedó con las ganas de verlo jugar en el Palacio de Deportes de Granada. Prepararon pancartas de ánimo, pero se ve que para Plaza, la victoria de ayer era mucho más importante que dar unos minutos a un granadino que ya viste la camiseta de los grandes, la del Real Madrid. Y es que ayer se notó que el equipo merengue es grande.

El Palacio se llenó y vistió como sus grandes galas, incluso TVE estuvo como testigo, aunque para algunos espectadores su presencia fue inoportuna. Dos seguidoras se pasaron toda la primera parte de pie, en el sector B, pues las tres cámaras principales de la cadena pública española molestaban para ver el choque. Después debieron plantearse su incómoda situación, pues cambiaron de sitio.

Por cierto, hablando de asientos, el palco de autoridades estuvo menos poblado que de costumbre. Aunque como los medios este año están algo alejados de José Julián y compañía -las cabinas están enfrente- no podemos contarles quiénes faltaban respecto a ocasiones pasadas, pues los prismáticos se quedaron en casa.

El mismo sitio donde no quisieron quedarse aquellos que son arduos seguidores del Real Madrid. En algún triple de Bullock algunos lo celebraron, incluso se llegó a ver alguna que otra banderola blanca en las gradas. No es de extrañar en una ciudad en la que los títulos del conjunto madridista se celebran con más ahínco que los de los propios equipos locales.

Para terminar ¿se han fijado la cantidad de gente al descanso se sale del Palacio a fumarse un pitillo? Y es que un recinto deportivo no es el sitio adecuado para los fumadores.