Por fin ha vuelto el baloncesto ACB al Palacio..., y ha entrado en él con el pie derecho. No siempre lo que empieza bien acaba en sintonía, tal como se demostró la pasada campaña, pero siempre es de agradecer comenzar con una victoria porque en esta Liga hay que restar cuanto antes el cupo de triunfos que hace falta para seguir ahí. Por tanto, ya se puede poner la primera cruz. Además, esta temporada baja el decimosexto y el inicio de competición que ha deparado el calendario no deja mucho espacio al error, sobre todo en los partidos en los que el CB Granada lleve la etiqueta de local. Aunque al final todos juegan contra todos, no es lo mismo verse a las primeras de cambio con el ánimo atenazado por la necesidad de ganar o con las muñecas sueltas por la escasa presión. Esto lo puede explicar muy bien Trifón Poch, que hace unas temporadas vio como su Alicante había salvado la temporada antes de Navidad. Y acabó en Europa. Lo de la siguiente campaña es otra historia.

l PASO A PASO

Es como un lema machacón que se repite una y otra vez desde el CB Granada. Y con razón. Se ha dado el primero y faltan, por lo menos, once o doce más... si es que el objetivo es el de siempre: la permanencia. De momento hay que insistir en que esto no ha hecho más que comenzar y que todavía queda un mundo por delante. Más concretamente, siete meses de competición. Y si cae la breva, algo más. Para empezar, no estaría de más sacar algo de Vistalegre, aunque el Real Madrid va a esperar a los nuestros con el cuchillo entre los dientes después de que la soberana paliza que le dio el Unicaja le haya colocado en puesto de descenso... ¡junto al Joventut! A los merengues no les gusta estar ahí.

l CONFIANZA

Al nuevo técnico le dio resultado repartirla buena dosis entre sus pupilos. A Borchardt, al que mantuvo muchos minutos en pista a pesar de que el estadounidense y el acierto no se conjugaron en el mismo tiempo durante muchos minutos. Pero más méritos que dar responsabilidad al jugador franquicia del equipo fue, pienso, poner el partido en manos de jugadores como Jasen y Aguilar. El argentino tendrá muchas ganas de demostrar a Poch que es válido después de que la pasada temporada llegase a pedir su salida del club por incompatibilidad con el anterior responsable del banquillo granadino. Y ante el Bruesa la verdad es que no desentonó hasta que se le fue un poco la pinza. En defensa trabajó con seriedad y mucho desgaste físico.

Del joven Aguilar se puede decir que dio pinceladas de lo que puede llegar a ser. Para ello, no debe creerse mucho lo bueno que se cuente de él, pero hay que subrayar que ante los donostiarras demostró desparpajo, valentía, físico, buena defensa y deseos de crecer como jugador.

l DOMINGO CASERO.

Este fin de semana toca otro partido en el Palacio. Será contra el Cajasol de Humet, Mateo y Pecile. Ahora nosotros tenemos a Aranda, Abella y Hunter. Se puede ganar. Hay que ganar.