El Covirán Granada disputó su último partido del año 2020 el pasado 22 de diciembre. Este domingo debería regresar a la competición ante el CB Almansa sin embargo, la entidad castellano-manchega comunicó el jueves que un miembro del equipo ha dado positivo por Covid-19. El resto de la plantilla ha dado negativo en los test de antígenos y guardará cuarentena hasta confirmar esos resultados con un nuevo test PCR.

El protocolo de la Federación Española de Baloncesto establece que si hay contacto entre el positivo y el resto del plantel 24 horas antes de confirmarse, el choque debe quedar suspendido. Por tanto, el conjunto de Pablo Pin no jugará un duelo que estaba previsto que se disputase a las 16:00 horas en el Palacio de Deportes. La FEB ya ha comunicado el aplazamiento del choque y ahora habrá que buscar una fecha para disputarlo.

Excepción

Fue una situación similar a la que le ocurrió a la entidad granadina en la sexta jornada en la semana previa a recibir a Girona. Alejandro Bortolussi dio positivo pero en este caso la plantilla rojinegra no había entrenado 24 horas antes por lo que, tras dar negativo por coronavirus el resto de la plantilla en una prueba PCR en la previa del duelo ante el cuadro catalán, el duelo se disputó. Ha sido el único caso en el que no se ha suspendido un encuentro en LEB Oro.

El Covirán volverán a jugar en el Palacio el próximo fin de semana.

Por tanto, los de Pablo Pin deberán esperar al próximo sábado, de nuevo a las 16:00 horas ante Lleida, para volver a la competición. Quizá pueda suponer un inconveniente no medirse al cuadro entrenado por Rubén Perelló pero los problemas físicos que han pasado los jugadores de la entidad nazarí en las últimas semanas como Christian Díaz y Lluís Costa, que habrían llegado a la cita justos, o Manu Rodríguez, hacen que no venga mal el aplazamiento.

Cambio de planes

Esto ha provocado que el cuerpo técnico del Covirán haya cambiado un tanto la planificación semanal, dando descanso Pin a sus jugadores el primer día del año pero este sábado volverán al trabajo y será el lunes cuando inicien una nueva semana. A la cita ante Lleida llegarán frescos a nivel físico pues serán 18 días sin competir. La segunda vuelta arrancó con victoria en Huesca y el mes de enero es clave sobre todo porque, en un principio, se iban a jugar cuatro partidos y tres de ellos ejerciendo como local. El nuevo sistema de competición hace que las victorias ante equipos con opciones de pasar a la segunda fase cuenten, por lo que citas ante Almansa, Lleida, Alicante o Castellón cobrarán especial importancia como ha reconocido Pablo Pin.