Simon Yates (Mitchelton), consiguió la victoria en la cuarta jornada de la Vuelta Ciclista a Andalucía, disputada entre Armilla y Granada, en la que Jakob Fuglsang (Astana), se situó como nuevo líder a falta de un día aprovechando el desfallecimiento de Tim Wellens (Lotto), que perdió tres minutos en la meta de la etapa reina.

La jornada con sabor a montaña empezó movida desde el inicio y el granadino Álvaro Cuadros (Caja Rural) se dejó ver ante su afición al coronar el alto de La Malahá en primera posición. En el descenso se formaron dos grupos separados por 15 segundos.

En el pelotón el Astana marcaba un fuerte ritmo y en el ascenso al Purche se volvió a la normalidad y la escapada fue neutralizada, antes de que en las dos últimas subidas, la de Güéjar Sierra y la de Hazallanas, se decidió el triunfo de etapa y casi la clasificación general. Simon Yates, el ganador en 2018 de la Vuelta a España y sin opciones en la ronda andaluza, lanzó un ataque brutal al que no pudieron responder los corredores del Astana, que por entonces ya había logrado su objetivo, que no era otro que descolgar a Wellens, el líder de la carrera, que además sufrió una caída.

El británico marcó un ritmo infernal y empezó a abrir brecha tpara pasar con 45 segundos de ventaja por Hazallanas, a 20 kilómetros de la meta. Por detrás, iban Jakob Fuglsang y Ion Izagirre (Astana), a los que en la bajada se ha unido su compañero, Pello Bilbao, entre otros. Pero Yates no cedió en la bajada y logró la victoria en el Paseo de la Bomba de Granada, mientras que Fuglsang, a falta de una etapa, se colocó el nuevo líder, con 7 segundos de ventaja a su compañero Izagirre para afrontar la última jornada, de 164 kilómetros entre Otura y Alhaurín de la Torre, con cinco subidas de montaña, pero un tramo final de 30 kilómetros llano.