Força Lleida-Covirán Granada | Crónica

Fin a la racha positiva del Covirán Granada

  • Los pupilos de Pablo Pin caen en la pista del Lleida (78-69) después de ocho victorias consecutivas

Niang intenta un tapón.

Niang intenta un tapón. / Pol Puertas (Força Lleida)

En algún momento tenía que llegar. El Covirán Granada dice adiós a su sobresaliente racha de victorias (se quedó en ocho) con una derrota en la cancha de un Força Lleida (78-69) que mereció el triunfo después de ser superior en el cómputo global del encuentro. Un desastroso primer cuarto, unido a un poquísimo acierto en tiros de campo y una excelsa defensa local, supuso un pesado lastre del que los rojinegros no se pudieron reponer en ningún momento.

Mal inicio

El primer cuarto fue para olvidar. La pesadilla de los pupilos de Pablo Pin duró algo más de cinco minutos, cuando los locales salieron vencedores de un llamativo intercambio de fallos e imprecisiones que terminó a los dos minutos con la canasta de González. A partir de aquí, el Força Lleida se hizo fuerte, en parte gracias a la participación de la grada, y clavó un doloroso 12-0 que costó remontar sangre y sudor.

El primero en sumar para los rojinegros, tras tres triples ilerdenses y cinco minutos y medio de partido, fue Thomas Bropleh. El estadounidense puso fin a la sangría con una canasta que Marcos, con otro lanzamiento de tres, echó por tierra (17-7).

Reacción

La reacción visitante tardó en llegar mas consiguió a tiempo. Los granadinos consiguieron recortar mediante la genial actuación conjunta de unos acertados James Ellisor y Christian Díaz. La dupla del Covirán mostró el carácter habitual (y falto en el comienzo) y llevó la diferencia local a siete puntos al término del primer parcial.

La respuesta coral terminó por darse, eso sí, en el segundo cuarto. El base canario tomó las riendas del encuentro y sumó 12 puntos y 2 asistencias a su casillero que metieron de lleno a los rojinegros en la disputa del partido y próximos al Força Lleida en el electrónico del Barris Nord e incluso por delante en el tramo final de la primera parte. Pere Tomàs convirtió el 35-37 y Bropleh, poco después del empate catalán, el 37-39. No obstante, un preciso tiro de tres de Schreiner mantuvo la ventaja local a la finalización del segundo cuarto y el paso a los vestuarios.

Timón

Tras el descanso el encuentro estuvo varios minutos buscando dueño. El tira y afloja constante entre ambos conjuntos beneficiaba al Força Lleida, que seguía sacando rédito de la ventaja obtenida en los primeros instantes del duelo y a otra remesa de triples cosechada por la escuadra entrenada por Gerard Encuentra. Michael Carrera y Juani Marcos (15 y 12 puntos) los encargados de castigar los errores nazaríes, se hicieron grandes en el tercer cuarto y llevaron a 61-54 el electrónico a falta de diez minutos para el término del partido.

Con todo en juego se repitió la tónica vista en los momentos anteriores. La falta de acierto (y a veces de atrevimiento) por parte del Covirán Granada y la sobresaliente defensa del combinado catalán mantuvo prácticamente en la totalidad del partido una distancia de entre seis y siete puntos a favor del ICG Força Lleida.

Sentencia

Juani Marcos, internacional argentino en sus categorías inferiores, se desmarcó como la gran figura del envite con un triple más, siempre desmarcado, que dejó grogui a los pupilos de Pin. El rebote ofensivo terminó por desesperar a los granadinos y a Pablo Pin, que pidió un tiempo muerto a dos minutos del final y con nueve de desventaja buscando una solución que jamás terminaría por darse.

El Covirán acabó por desinflarse totalmente en último tramo del duelo e incluso estuvo a punto de perder el average particular con el cuadro ilerdense. Una canasta agónica de Lluis Costa en el último segundo impidió que los catalanes celebrasen por partida doble.

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