Unicaja Málaga-Covirán Granada | Crónica y resultado

El Covirán Granada se muestra impotente ante Unicaja y suma una nueva derrota (94-68)

  • El conjunto de Pablo Pin cae en un duelo marcado por una mala primera mitad y las numerosas pérdidas de balón

  • Dejan Todorovic volvió a jugar tras recuperarse de su lesión en un duelo con un gran ambiente en las gradas

Alex Renfroe fue el mejor jugador del Covirán en Málaga.

Alex Renfroe fue el mejor jugador del Covirán en Málaga. / ACB Photo (Málaga)

El Covirán Granada no pudo darle una alegría a los casi mil aficionados que se desplazaron a Málaga, tras caer ante Unicaja (94-68) en un duelo marcado por una mala defensa en la primera mitad y las numerosas pérdidas de balón. El debut de Dejan Todorovic tras su peor lesión fue de las pocas noticias buenas de un equipo que sufrió mucho para anotar.

En un duelo con un gran ambiente en las gradas, fue el conjunto de Pablo Pin el que comenzó a contar con las primeras ventajas, las únicas de las que gozó en todo el encuentro. Y lo hizo gracias a Cristiano Felicio, que se echó el equipo a sus espaldas y con cuatro puntos seguidos aprovechó la precipitación de los locales. Los rojinegros apostaron por el alto ritmo, y hasta que Unicaja no se adaptó a ello, el dominio fue granadino.

Dedovic protagonista

Un 0 de 5 en triples evitó que los de Ibon Navarro mandarán en el electrónico. Pero apareció la figura de Nihad Dedovic y todo cambió. El escolta nacido en Bosnia y nacionalizado alemán agitó de un plumazo el choque. Anotó quince puntos en un pispás, entre ellos, tres triples consecutivos. Nadie logró pararlo y de cinco puntos de renta para los malacitanos, se pasó a doce a 1:32 del final del primer cuarto, lo que obligó a Pablo Pin a parar el choque tras un parcial de 9-0, en el que también colaboró, desde la esquina y más allá de 6,75 Dylan Osetkowski. Del 0/5 inicial desde el perímetro, se pasó al 5/10. David Kravish tomó el relevo de Dedovic y tras el tiempo muerto permitió a Unicaja vencer por 14. Pero, sin duda, fueron las nueves pérdidas en diez minutos la principal rémora de un primer cuarto que con concluyó con un resultado de 29-16.

Los rojinegros encajaron 52 puntos en la primera mitad

Una vez más, fueron demasiados los puntos encajados. Y es que Navarro, que ya avisó que el objetivo era frenar el ritmo de juego de los de Pin, ordenó a sus jugadores presionar mucho la primera línea de pase y eso provocó regalar numerosos balones. Con dos bases, Christian Díaz y Lluís Costa, arrancó el segundo periodo en el que un parcial de 0-5, gracias al segundo triple de Thomas Bropleh, hizo albergar esperanzas. Sin embargo, esta vez fue Melvin Ejim el que, con dos canastas seguidas, mantuvo la renta de su equipo por encima de la decena de puntos.

Debut de Todorovic

Con Dejan Todorovic en pista en sus primeros minutos con el Covirán, emergió la figura de Alex Renfroe. El base norteamericano, con un triple y un 2+1 dio cierto respiro en ataque a los rojinegros. De no ser por él, la ventaja malagueña habría sido muy superior pues llegó a ser de 18.

Un parcial de 0-6 metió al Covirán en el choque. Todorovic y Felicio, con cinco puntos seguidos para completar un 3-11, obligaron a Ibon Navarro a parar el choque con su equipo ocho arriba, a 58 segundos del descanso. Finalmente se llegó al receso 12 abajo (52-40). Demasiados puntos encajados al descanso una vez más.

Thomas Bropleh volvió a superar la decena de puntos. Thomas Bropleh volvió a superar la decena de puntos.

Thomas Bropleh volvió a superar la decena de puntos. / ACB Photo (Málaga)

Por tanto, había que mejorar mucho atrás si se quería tener opciones de victoria. A ambas escuadras les costó mucho anotar en el arranque de la segunda mitad. De nuevo Dedovic salió al rescate de Unicaja para evitar que los visitantes se metieran de lleno en el choque. Unicaja vivió cómodo y gracias a los numerosos recursos ofensivos con los que contó, rozó la veintena de renta (60-42) tras un parcial de 8-2 tras el paso por los vestuarios. Pin frenó el duelo intentando buscar soluciones en ambas pistas pues en ataque costó mucho hacer daño y en defensa, aunque se mejoró, no fue suficiente para frenar el caudal ofensivo del rival.

Sólo Renfroe

Con Maye poco acertado en el tiro, Cristiano Felicio demasiado solo en la zona y con poca aportación de Pere Tomàs, Jacobo Díaz y Todorovic en el perímetro, el Covirán vivió de Renfroe, las penetraciones de Christian Díaz y las intermitencia de Bropleh. Demasiado poco para poder recortar diferencias. Porque Unicaja no dejó que se bajara de los 14 casi nunca. Hasta que Bropleh, con su tercer triple, dejó en once la cifra a remontar en los últimos diez minutos de partido (67-56).

Pablo Pin de desesperó con sus jugadores en un tiempo muerto y rompió la pizarra de las instrucciones

Se ganó el tercer cuarto, dejando a Unicaja en tan sólo quince puntos anotados y un 0/6 en triples. Las prestaciones defensivas fueron otras y gracias a ello, se entró en el cuarto decisivo con alguna esperanza de poder dar un susto a su rival. Pero fue un espejismo, pues dos triples seguidos de los malacitanos, sumadas a dos pérdidas consecutivas de los de Pin, devolvió un margen a Unicaja que le otorgó la tranquilidad definitiva. El Covirán tampoco aprovechó las opciones que tuvo para recortar puntos como la antideportiva que sufrió Bropleh. Definitivamente, no fue el mejor partido en ataque.

Desde el banquillo se intentó de todo. De hecho, Todorovic jugó muchos más minutos de los esperados pero un triple de Darío Brizuela llevó de nuevo los 18 de desventaja. Ello provocó la desesperación de Pablo Pin que en el tiempo muerto que solicitó a continuación, rompió a base de golpes la pizarra con la que ordena las jugadas a sus pupilos a los que les pidió que hiciera falta. Un reflejo de la impotencia de un equipo que fue inferior a su rival en todo momento y cuando no corre, sufre.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios