Análisis
Rafael Salgueiro
El cambio climático, excusa para todo
San Roque/Las negociaciones del nuevo convenio colectivo de las refinerías de Moeve (antes Cepsa) en San Roque, Huelva y Tenerife ya visualizan su final. Sindicatos y empresa han llegado a un preacuerdo que servirá de base para, en los próximos días, proceder a la redacción detallada del documento que marcará las condiciones laborales de los trabajadores durante los próximos años.
El preacuerdo está basado en los acuerdos de las mesas delegadas, por un lado, de San Roque y Tenerife y, por el otro, de Huelva, que han servido de base de trabajo para dar forma al documento. A partir de ahora, según explican fuentes sindicales a este periódico, arranca un proceso que puede durar unas dos semanas en que sindicatos y empresa procedan a la redacción del propio convenio colectivo, proceso largo al tener que ser minuciosamente supervisado para dejar claros todos los aspectos del mismo para evitar malentendidos.
El documento provisional que han acordado las partes mantiene la tendencia de la resolución de la mesa delegada de San Roque y Tenerife que, como transmitían entonces desde los sindicatos, beneficiaba especialmente a los trabajadores de turnos, mientras que los de jornada normal quedaban un paso por detrás. Entonces, la mesa acordó que en el borrador de convenio se abordaría nuevamente la situación de estos trabajadores para mejorar sus condiciones, lo cual se ha cumplido, aunque no parece haber alcanzado las expectativas de este colectivo.
A partir de ahora, a la hora de dar forma al convenio a partir del preacuerdo, señalan desde los sindicatos, hay un pequeño margen para hacer retoques, sobre todo en la forma de redactar y señalar, por ejemplo, cómo se realizan algunos abonos. En este punto, intentarán introducir algunas variaciones para que el turno normal quede en mejor posición de la preacordada, a expensas de llegar a acuerdos con la empresa.
Durante el margen de dos semanas que aventuran puede durar la redacción del convenio, el Sindicato de Trabajadores (STR), mayoritario en la mesa negociadora, espera poder celebrar una asamblea, a expensas de fijar una fecha. En esta cita, sus afiliados podrán votar la postura de la organización, paso necesario para que den su visto bueno al documento final.
Una vez sindicatos y la antigua Cepsa firmen el documento, se celebrará una votación entre los casi 2.000 trabajadores de las plantas a los que afecta este convenio en la que decidirán definitivamente si se aprueba el mismo. Al haber una mayoría de la plantilla a turnos, no debería haber problema en que se acabe aprobando.
El director del parque energético de Moeve en San Roque, Rosendo Rivero, asegura que el convenio es "maduro", con mucho desarrollo en materia salarial y social, y que se encuentra a falta de ultimar "los flecos". El responsable de la planta se manifiesta optimista y celebra que la energética cuente con su propio convenio colectivo, sin necesidad de adscribirse al genérico del sector.
También te puede interesar
Análisis
Rafael Salgueiro
El cambio climático, excusa para todo
Rosendo Rivero | Director del Parque Energético de Moeve en San Roque
"La transición verde dependerá mucho del consumidor"