Los presidentes de las comunidades autónomas gobernadas por el PP pedirán al Gobierno que convoque el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) para que explique por qué no ha prorrogado los presupuestos del Estado, lo que les impide tener una previsión de ingresos para hacer sus cuentas. 

Así lo ha anunciado el presidente de los populares andaluces, Javier Arenas, en el acto de clausura de la convención nacional del PP, en el que ha explicado que los presidentes autonómicos solicitarán el lunes al Ejecutivo dicha reunión. 

Los populares llevan semanas pidiendo la prórroga de las cuentas del Estado de 2011 para que los gobiernos autonómicos sepan con qué ingresos cuentan y puedan elaborar sus propios presupuestos, pero el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero ya advertido de que no lo hará porque considera que le corresponde hacerlo al Gobierno que salga de las urnas el próximo 20 de noviembre. 

Según ha explicado Arenas en su intervención, los "presupuestos falsos del Estado que negaban la crisis" han sido "claves para aumentar los problemas económicos y el déficit de las comunidades autónomas". 

"No queremos que vuelva a pasar" y por eso se pedirá la convocatoria del Consejo de Política Fiscal, ha añadido el líder del PP andaluz. 

Los populares quieren que el Gobierno explique ante el CPFF dos cosas, según Arenas. 

En primer lugar, que les explique por qué no ha prorrogado los presupuestos cuando "es su obligación" y al no hacerlo "deja en el aire los ingresos de las comunidades autónomas". 

También quieren las comunidades del PP que se expliquen mejor las estimaciones de crecimiento y una previsión de ingresos "que no se cree ni el propio Gobierno", ha añadido Arenas. 

El anuncio de Arenas se produce un día después de la reunión que, en el seno de esta convención, mantuvo el líder del PP, Mariano Rajoy, con los presidentes de gobiernos autonómicos de su partido. 

Los presidentes trasladaron a Rajoy su preocupación por el estado de sus cuentas y por las dificultades que están teniendo para elaborar sus presupuestos al no tener una previsión de ingresos del Estado porque el Gobierno no ha prorrogado los suyos. 

Todo ello ocurrió en una jornada en la que la agencia de medición de riesgo Fitch rebajó en dos escalones la calificación de España para afrontar su deuda a largo plazo por la intensificación de la crisis europea y las dudas sobre el cumplimiento de los objetivos de reducción de déficit por los problemas de las comunidades autónomas.