Y el domingo con Misterios desvelados II. Aunque incluyen efectos descriptivos, las Sonatas del rosario buscan ante todo la adaptación sutil del color y la sonoridad de cada pieza a las implicaciones expresivas del misterio que representan. Para lograrlo, Biber recurrió al procedimiento de la scordatura, esto es, la afinación no convencional de las cuerdas del violín. Solo la primera de las sonatas y la Passacaglia final requieren la afinación normal, por quintas, del instrumento. Construidas con la libertad formal característica del stylus phantasticus, cada sonata es un mundo abierto a la experimentación, la fantasía y el impacto emocional del oyente.

Lina Tur Bonet es una violinista y directora española. De origen ibicenco, recibió sus primeras lecciones de música a la edad de tres años, de la mano de su padre, Antonio Tur, compaginándolo con clases de danza. Fuera de España, se formó como violinista en las Universidades de Friburgo y Viena, por cuya Musikhochschule es Magistra Artis. También recibe clases magistrales de emiencias como Tibor Varga, Franco Gulli, etc., obteniendo becas de la Alexander von Humbold-Stiftung, la ÖAD Austria, y la Fundación Séneca. Ha impartido cursos dentro y fuera de España. Ha ocupado la cátedra de violín romántico en el Conservatorio de Superior de Aragón. Actualmente, imparte sus clases en el Centro Superior Katarina Gurska.

Ha interpretado las Sonatas del rosario de H.I.F. von Biber en Tokio, Madrid y Viena, ha sido concertino de un centenar de Cantatas de Bach y de sus Pasiones, ha interpretado el Cuarteto pour la fin du temps de Olivier Messiaen o los de W. Lutoslawsky y Morton Feldman en la Fundación Antoni Tàpies de Barcelona, e interpretado como solista con orquesta obras de Vivaldi, Bach, Mozart, Beethoven, Brahms, Ravel, Chausson, Mendelssohn o Piazzolla con orquestas de cámara y sinfónicas dentro y fuera de su país. Ha estrenado la obra Melancholia para violín solo y Far Water para violín y cantante de Teatro Noh, ambas dedicadas a ella por el compositor José María Sánchez Verdú, en Tokio. Fue invitada del Festival de Montreal para interpretar la integral de la obra para violín solo de J.S.Bach.

Lina Tur Bonet participa como concertino en agrupaciones como Il Complesso Barocco, Concerto Köln, Clemencic Consort, Orquesta de Cámara de Mannheim, Bach Consort de Viena, Neue Hofkapelle Munich, Orquesta del Teatro del Liceo, Orquesta Sinfónica de Las Palmas, Orquesta del Palau de les Arts de Valencia, Euskal Baroque Ensemble, Estil Concertant, Accademia del Piacere, La Ritirata, Hippocampus, Forma Antiqva, United Continuo Ensemble, o la Capilla Real de Madrid, colaborando con orquestas como Les Musiciens du Louvre..., entre muchas otras. Ha trabajado bajo la batuta de Claudio Abbado, Daniel Harding, Sir John Eliot Gardiner, etc., y actúa con regularidad en grupos de cámara.

Durante este tiempo ha realizado giras por toda Europa, E.E.U.U, Sudamérica y Asia, actuando en los más importantes escenarios del mundo como el Lincoln Center New York, Berliner Philarmonie, Scala de Milan, Concertgebouw de Ámsterdam, Royal Albert Hall. Ha sido grabada en varias ocasiones por la BBC en Londres, SWR alemana, RTVE, TV3, las televisiones de Eslovenia, Croacia y Bulgaria y la ORF austríaca. Recientemente, sus compromisos la han llevado a Estados Unidos, Tokio, Sudamérica, e Israel.

Lina Tur Bonet (en el centro)

Un programa bohemio de origen

-Este espectáculo está teniendo mucho éxito por todo el mundo y allá donde lo llevan triunfa, ¿qué peculiaridades tiene el programa?

-Es una de las obras más importantes de la historia de la música, se toca muy poco porque exige muchos instrumentos. En cada sonata el violín debe sonar diferente, es un programa sin duda muy especial. Como bien dices lo hemos tocado ya en muchos sitios y en todos ha triunfado, se ha grabado en disco, que en esta ocasión también habrá uno disponible, y hemos recibido infinidad de premios y reconocimientos. Esto es una vez en la vida, actuar en el festival con este espectáculo en un escenario como es el Monasterio de San Jerónimo es tremendamente especial.

-¿Toca algún instrumento además del violín?

-Sí, la viola y la viola de amor.

''Es una de las obras más importantes de la historia de la música, se toca muy poco porque exige muchos instrumentos'

-Tiene usted una carrera muy exitosa, ¿qué logro profesional la enorgullece más?

-Pues todos los logros que acarreo son metas conseguidas, pero me satisface mucho lo que siente por esta obra en concreto que llevamos a Granada. Hemos recibido el calor del público y su emoción además de galardones y maravillosas críticas, como el Premio GEMA a mejor producción discográfica de 2015 y nominación al Mejor CD de música antigua del 2015 por los International Classic Music Awards, por parte de publicaciones como Grammophone, BBC Music Magazine o Scherzo, 5 diapasones, el Melómano de oro, etc.

-No es la primera vez que visita el festival, ¿qué expectativas tiene?

-Es cierto, estuve hace dos años en el festival y también he estado de directora de la OCG. Para mi Granada es un sitio mágico y precioso con un público muy entregado, así que creo que vamos a disfrutar todos.