La hija mayor de Alejandro Sanz, Manuela, acaba de cumplir 19 años, una celebración muy especial que se produjo justo un mes después de su debut en Instagram. La primogénita del cantante madrileño y la mexicana Jaydy Michel cuenta con más de 45.000 seguidores y no para de sumar nuevos adeptos, entre ellos amigos de su padre como Miguel Bosé y rostros famosos como Sara Carbonero; Genovena Casanova o La Flaka.
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En su perfil público, la madrileña compartía imágenes de algunos de sus viajes, instantáneas junto a sus amigos y, cómo no, sus hermanos y su padre, con los que mantiene una relación muy especial pese a la distancia.
"Una parte de mi corazón está de cumpleaños. Es magia verte crecer, ver cómo superas cada día la mejor versión de ti misma. Te amo", fue la dedicatoria de la estrella musica, junto a una fotografía donde el intérprete de Corazón partío le da un beso. Su madre, que el pasado 23 de julio se despidió para siempre de su padre, Octavio Michel Peiro, también le brindó unas bonitas palabras: "Mi princesa hermosa, ¿cómo resumir en simples palabras el gran amor que he conocido gracias a tu existencia? Llegaste a mi vida a enseñarme lo que en verdad importa en la vida. Gracias amor mío por ser la persona tan maravillosa que eres".
Manuela, que presume de mantener una relación muy cordinal con Raquel Perera y Rachel Valdés, ex mujer y actual pareja del cantante madrileño, parece decantar sus gustos profesionales por el mundo de la moda. El pasado mes de abril, la modelo mexicana mostró orgullosa la enorme creatividad de Manuela y sus buenas maneras con la costura durante el confinamiento. “En dos días ha hecho varias bolsas con trozos de tela que tenía guardados. Mi diseñadora, te amo tanto...”, escribió la mujer de Rafa Márquez.
Lo cierto es que la influencer podría haber hecho público su perfil en redes para poder compartir todas esas inquietudes creativas, que en estos momentos compagina con sus estudios en México, donde reside desde hace años con su progenitora, la pareja de esta y su hermano Leonardo Márquez.
Asimismo, parece haber heredado también un talento innato para la pintura, el yoga y la música, aunque esta parcela prefiere reservala para los momentos intimidad con familia y amigos. Toca a la perfección el piano y tiene muy buen oído y voz. Su primera vez en el escenario fue hace cuatro años durante un concierto de su padre en México. Manuela se sumó a los coros en la canción Un zombie a la intemperie. “Un aplauso para esta nueva cantante que se ha estrenado aquí en Guadalajara, Manuela Sánchez Michel, ¡es mi hija!”, dijo el compositor español ante su entregado público.
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