Los vecinos ya pueden descansar tranquilos: las noches de alcohol y ruido en el botellódromo han terminado. El alcalde de Granada, Paco Cuenca, los concejales de la corporación municipal, los grupos de la oposición y los vecinos, se acercaron ayer hasta el polémico recinto para vivir lo contrario a una inauguración. En lugar de cortar la cinta, en este acto simbólico lo que se puso es una valla a la explanada. Un cierre metálico para recordar a los jóvenes que Granada camina hacia la capitalidad cultural europea que, por supuesto, queda muy alejada de las diversiones etílicas, las conductas incívicas y la vergüenza.

"Hoy es un día para celebrar un hito histórico: dejamos de ser la capital de botellón para convertirnos en un espacio de ocio, de cultura, de convivencia y sobre todo donde los vecinos recuperan su derecho al descanso", detalló ayer Cuenca, que insistió en que el proyecto de futuro para los jóvenes pasa por incorporarlos a las calles con fórmulas de ocio donde conviva la ciudadanía independientemente de su edad.

Tanto es así que el equipo de Gobierno ha preparado para esta noche la celebración de un conjunto de actividades deportivas en dos puntos de la ciudad: la explanada del Palacio de Congresos y la Plaza de Las Pasiegas, en este afán del PSOE de abrir el espacio público a los vecinos tras diez años de encorsetamiento como consecuencia de la Ordenanza de la Convivencia aprobada por el anterior mandato para frenar las conductas incívicas y que, como daño colateral, expulsó a los granadinos de la vía pública.

La presencia de todos los grupos políticos -PSOE, PP, Ciudadanos, Vamos Granada e IU- en la cita para cerrar simbólicamente el botellódromo no pasó inadvertida ni para los medios ni para los vecinos, que se mostraron ayer orgullosos de haber conseguido un consenso político en un Ayuntamiento, donde lo normal es el rifirrafe diario. Ayer, todos estaban de acuerdo en cerrar una etapa marcada por el botellódromo, que llegó a su fin y no quisieron perderse la cita. "Hoy se cierra una década marcada por una identidad nefasta para la ciudad: ser la capital del botellón", destacó Cuenca, que recordó que este no es el único paso a seguir sino que el Ayuntamiento está trabajando en tres líneas de actuación para alejar a los jóvenes de las diversiones etílicas y acercarlos a un ocio saludable.

Por una parte, la capital tiene una mesa de trabajo de seguridad. Se trata del espacio donde Policía Local, Nacional y Autonómica se han aliado para ponerle freno al consumo de alcohol a partir del cierre del botellódromo. El propio Cuenca avanzó ayer que los meses más conflictivos comenzarán en octubre y noviembre, con la llegada de los más de 60.000 estudiantes universitarios que residen en la ciudad. No obstante, se ha concretado un dispositivo especial que sumará 25 agentes locales extra para detectar posibles contactos de botellón en las zonas "calientes". Estos agentes realizarán en una primera instancia una labor disuasoria e informativa que, dependiendo de la gravedad, puede entrañar sanciones de entre 150 y 300 euros. Además, se van a incrementar los controles de alcoholemia y se va ha hacer un esfuerzo porque los pisos no se conviertan en el espacio de las fiestas y el ruido. Para ello, está previsto modificar la ordenanza de tal forma que los caseros sean responsables "solidarios" de las viviendas y puedan identificar a los inquilinos en caso de que la policía no pueda hacerlo. De lo contrario, también están previstas sanciones para estos propietarios que podrán identificarse mediante el padrón municipal.

De forma paralela, el área de Juventud y Deportes ha ideado varios programas de ocio para la ciudad. El concejal responsable, Eduardo Castillo, remarcó durante la presentación de estas propuestas que no son actividades alternativas sino una nueva oferta de ocio para atraer a los jóvenes hacia una diversión saludable. Así, esta noche la explanada del Palacio de Congresos será tomada por patinadores, jugadores de balonmano, o bádminton. Los jóvenes que lo deseen podrán participar en las actividades que se realizarán en este espacio, donde también habrá partidos de fútbol 7. Aunque sin duda, las estrellas de la noche serán algunos jugadores del Granada CF que se acercarán hasta la explanada, donde protagonizarán entrevistas retransmitidas en una pantalla con un claro mensaje: las ventajas del deporte y el ocio saludable. Será entre las 21:00 y la 1:00 de la madrugada. Mientras tanto, en la Plaza de las Pasiegas habrá yoga y bailes latinos de 9:00 a 12:00. Para la noche del sábado también están previstas actividades deportivas en la explanada del Palacio de Congresos.

Por otra parte, para las próximas semanas, el edil explicó que se presentarán nuevas propuestas desde otras áreas como Cultura.

El alcalde de Granada, Paco Cuenca, también avanzó ayer que esta tarde tendrá lugar la comisión educativa donde junto a expertos se concretarán los programas educativos que se van a desarrollar en colegios e institutos para abordar el problema del consumo del alcohol desde edades tempranas. "Para mí es una de las comisiones con más valor porque tiene como eje de trabajo la educación", destacó Cuenca, que cree que el compromiso cívico colectivo es imprescindible para el futuro de la ciudad.

El grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Granada se felicitó por el cierre del 'botellódromo' pero advirtió de que, a partir de ahora, estará "vigilante" para asegurarse de que se cumplen las ordenanzas y de que Granada no se convierte en una ciudad "de botellones en cada plaza". La portavoz del grupo, Rocío Díaz, recordó que el cierre de ese espacio era uno de los puntos del acuerdo de gobernabilidad al que el PP y C's llegaron tras las elecciones municipales de 2015 y criticó que el nuevo gobierno del PSOE haya procedido al cierre sin haber adoptado todas las medidas necesarias para evitar que a partir de ahora proliferen los grupos de jóvenes "bebiendo en cada esquina" así como dudó de las medidas alternativas propuestas por el PSOE".

El concejal de Ciudadanos, Manuel Olivares, también recordó que fue C's el grupo municipal que peleó por el cierre desde su llegada al Ayuntamiento para apoyar en aquel momento la investidura como alcalde del representante de la lista más votada. Asimismo, el edil, que felicitó ayer a los vecinos por el cierre del botellódromo", también les pidió perdón por haber soportado los ruidos durante casi nueve año cada fin de semana y por soportar tanto tiempo escuchando promesas de soluciones de unos y de otros sin que nadie hiciese nada".