La Asociación Andaluza de Enfermería Familiar y Comunitaria (Asanec) ha reclamado a la Junta que el nuevo Instituto de Salud de Andalucía no absorba a la Escuela Andaluza de Salud Pública (EASP) de Granada "por su estatus internacional". Además, advierte que esta integración podría provocar que deje de ser centro colaborador de la OMS.

La Asanec ha hecho esta recomendación ante la Comisión de Salud y Consumo del Parlamento de Andalucía, en la que ha recalcado que el cambio jurídico de la EASP supondría la pérdida del reconocimiento como centro colaborador de la Organización Mundial de la Salud (OMS), entre otras disfunciones.

La asociación de enfermería de familia ha recordado que la Escuela de Salud Pública es una sociedad mercantil y, cuando se extinga o se integre en el Instituto de Salud de Andalucía (ISA) diseñado por la Junta, perderá su personalidad jurídica propia. Ese paso afectará a su designación por parte de la Organización Mundial de la Salud, que desaparecería, porque esa asignación no podría transferirse al nuevo instituto.

La Asanec ha recalcado el "alto impacto negativo" de esa integración y ha recordado que la Escuela Andaluza de Salud Pública, con sede en Granada, es el único centro colaborador de la OMS de la región. La pérdida de la experiencia internacional también afectará a las opciones a presentarse a futuras licitaciones internacionales, ya que las administraciones públicas y las agencias administrativas no pueden presentarse a determinadas licitaciones de la Unión Europea, la OMS, la Organización Panamericana de Salud o el Banco Mundial, entre otros.

Según Asanec, la integración de la EASP en el Instituto puede traducirse en la pérdida de alianzas internacionales, de agilidad y de gestión de los proyectos, por lo que han recomendado que no se materialice esa absorción para evitar la pérdida de capacidad gestora, organizativa y de captación de recursos.