La Junta de Andalucía atiende cada año en Granada una media de 3.000 personas con problemas de drogodependencia y adicciones en alguno de los 12 centros de tratamiento ambulatorio que funcionan en la provincia. Estos centros constituyen el primer nivel de atención en la red de drogodependencias y están destinados a la prevención, orientación, desintoxicación, deshabituación y reinserción de personas drogodependientes de forma ambulatoria, realizándose a través de ellos las derivaciones oportunas de pacientes al resto de recursos de atención tanto provinciales como autonómicos.

El delegado de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía en Granada, Higinio Almagro, visitó ayer la sede de Grexales junto a su presidente, Antonio Castillo. En estas instalaciones Almagro puso el acento en la permisividad social al consumo del alcohol, "lo que hace que sea una de las drogas más consumidas en la actualidad y aún más preocupante, una de las más consumidas por los más jóvenes".

El 30% de las personas atendidas en los centros de tratamiento ambulatorio de la provincia de Granada lo son por consumo abusivo de alcohol, mientras que otro 40% lo son por adicción al cannabis. "La atención de cualquier adicción es muy importante pero más importante aún es la prevención", señaló el representante autonómico, quien dijo que "la edad de inicio al consumo de alcohol se produce entre los 13 y los 16 años". En este sentido y junto a la Consejería de Educación se han desarrollado distintas estrategias durante el curso 2012-2013 de las que se han beneficiado más de 8.000 alumnos de la provincia de Granada.