El único acuerdo económico entre el Patronato de la Alhambra y el Ayuntamiento de Granada será para rehabilitar el patrimonio de la ciudad. Esa es la conclusión que se extrae tanto de las palabras del director del Patronato, Reynaldo Fernández Manzano, como del alcalde de Granada, Paco Cuenca, que ayer reiteró que la capital está ultimando con la Alhambra un convenio para rehabilitar el patrimonio del Albaicín de tal forma que las ganancias del complejo monumental redunden en el histórico barrios, declarado patrimonio mundial de la humanidad en beneficio del turismo de la ciudad.

El alcalde hizo estas declaraciones después de conocer que un conjunto de empresarios turísticos ha propuesto una subida de cinco euros a las entradas de la Alhambra para destinar el 50% de esta recaudación extraordinaria a la Asociación para la Dinamización Turística, una plataforma impulsada por la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo. "Seguimos manteniendo una magnífica línea de diálogo con los empresarios del sector turístico", destacó el alcalde tras destacar cómo en las dos últimas reuniones tanto con la Federación como con la Convention Bureau ya se trasladó que el alcalde ha pedido al Patronato "un compromiso con la mejora de esta ciudad y con el Albaicín y el Sacromonte en cuanto a su rehabilitación".

En este sentido, Cuenca destacó que este compromiso se materializará en la firma de un convenio con la Consejería de Cultura y el Patronato de la Alhambra para dotar de forma permanente una cantidad que permita rehabilitar los espacios turísticos y darle mayor capacidad de atractivo "si cabe a la ciudad". "No se trata de crear una bolsa de ingresos, se trata de decir cómo se va a concretar la rehabilitación", incidió.

En el mismo día, el sindicato CCOO calificó de "indecente" la propuesta de la Federación de Hostelería que pretende recaudar de un servicio público, mientras mantiene bloqueado el convenio colectivo de miles de trabajadoras y trabajadores del sector de la Hostelería. Para CCOO, la Federación debería preocuparse menos de "hacer caja" y más de poner remedio a la altísima precariedad y empleo sumergido que se da en el sector.