Ocurre todos los días. Los viajeros que desean ir al centro de la capital en Metro sólo tienen dos opciones. Bajarse en Caleta y hacer un transbordo a un autobús de la Rober con las incomodidades que supone (aunque sea gratuito). O, hacerlo en Recogidas, para subir caminando hasta Puerta Real. Sin embargo, existe la posibilidad de que el Metro de Granada extienda sus vías para alcanzar la Fuente de las Batallas. Así lo cree el alcalde de la capital, Francisco Cuenca, que ayer incluyó esta propuesta en su discurso enmarcado en el debate del estado de la ciudad. Después de realizar un recorrido por todos los hitos que ha supuesto el gobierno socialista en la ciudad, el alcalde aplaudió las bondades del Metro y se lanzó a la piscina en lo que podría llamarse su primera promesa electoral.

"El Metro es en la actualidad tan importante en Granada que ya estamos planteando la posibilidad de su crecimiento con proyectos serios y creíbles que nos permiten aventurar una segunda línea que pueda recorrer el eje central de la ciudad, desde Caleta hasta Fuente de las Batallas", afirmó el primer edil que no se quedó ahí. También avanzó que ello permitiría, tal y como sucede en otras ciudades europeas, apostar por una peatonalización integral del centro histórico, devolviendo la ciudad a los peatones y acotando el uso de los vehículos privados".

Sin duda, el anuncio, el único novedoso de todo el debate, causó cierta sorpresa. Sobretodo teniendo en cuenta que hace apenas cinco meses y preguntado por el mismo asunto Cuenca aseguró que en ese momento la ampliación por el centro no estaba en el debate. Había que disfrutar del recién inaugurado Metro.

Fue la concejal de Movilidad, Raquel Ruz, quien en una entrevista concedida a este periódico afirmó que la ciudad debía abandonar la confrontación permanente a cuenta de la necesaria reordenación del transporte para pensar en un modelo de ciudad a largo plazo. Lo hizo, rescatando un proyecto que fue el origen de la actual infraestructura y que, finalmente no se materializó tras la decisión de desviar los convoys por Camino de Ronda. Pero ahora, la opción parece posible.

La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, ya mostró la pasada semana su aprobación ante una posible ampliación del Metro. No obstante, Díaz no se decantó por ningún tramo concreto. El alcalde sólo habló del centro pero a nadie se le escapa que la ampliación a otros municipios del área metropolitana también sería un acierto.

"El Metro se ha convertido en una línea más del transporte público de la ciudad, con la virtualidad de apostar por una visión metropolitana tan necesaria, tan imprescindible hoy día. El Metro ha sacado a 14.000 coches de la circunvalación y eso es algo que nuestros pulmones empiezan a agradecer, siendo todavía el escenario, en cuanto a calidad del aire en Granada, bastante mejorable", destacó en su discurso.

Por último, remarcó que la puesta en marcha ha sido posible gracias a la mejora del diálogo con la Junta de Andalucía tras una etapa de "confrontación". Asimismo, justificó la necesaria reordenación del transporte público que le ha valido un serio conflicto con la oposición que rechazó la imposición de un modelo aprobado en junta de gobierno local (que sólo depende del equipo de Gobierno y no en el pleno). Según dijo Cuenca, el "equipo de Gobierno se vio en la necesidad de enfrentarse al segundo de los problemas, el modelo de autobús urbano: la evolución del modelo LAC con un nuevo mapa de líneas de autobús que cumpla con los siguientes objetivos: menos transbordos, menos contaminación y más ahorro. Se trata de un sistema que va a reducir un 4% la contaminación en la ciudad arrojando 400.000 kilos menos de dióxido de carbono a nuestra atmósfera".