El Crucero del Hospital Real acogió el acto de investidura de Antonia Rodrigo como Honoris Causa por la Universidad de Granada. La historiadora y escritora, que se definió como "obrera de la pluma", recordó su compromiso con la Memoria Histórica, una labor que ha engarzado con la recuperación de figuras de mujeres relegadas por el hecho de serlo y con el compromiso de prestar su voz a las víctimas de la Guerra Civil y a las mujeres, olvidadas, relegadas o arrinconadas.

En su discurso, Rodrigo recordó la figura de Antonio Domínguez Ortiz, catedrático del Ángel Ganivet y que supuso para la niña Antonina una "epifanía creativa y de sentido vital". Tras esta mención, su discurso halló a la figura de Mariana Pineda, a la que la investigadora ha dedicado años de trabajo. "Mariana es una figura con la que crecí", con un papel destacado en su "toma de conciencia". Otro de sus "amores", Federico García Lorca, también desfiló en su intervención frente a representantes de la comunidad universitaria. "En Granada hubo miles de Federicos", aseguró, para recordar que también hay mujeres en las cunetas.

"Desde un principio tuve muy claro que, si la mujer no investigaba su pasado, nadie lo iba a hacer por ella", afirmó ante los asistentes. También recordó una anécdota, simbólica por lo que representa. "Yo misma creí durante un tiempo que Federica Montseny era una torera, porque mi madre me dijo que era una mujer que llenaba las plazas de toros".

"Mis investigaciones ha pretendido, durante toda mi carrera profesional, contribuir a nuestra sociedad  recuperando la memoria de aquellas personas, protagonistas singulares o anónimas, que tras la Guerra Civil cayeron en un pertinaz olvido", expuso Rodrigo, que fue presentada por la catedrática Amelina Correa, que adelantó que en breve saldrá una nueva edición de María Lejárraga, una mujer en la sombra, "con interesantísima documentación adicional".

La rectora, Pilar Aranda, mencionó que el "primer susurro" que sugirió la idoneidad de otorgar esta distinción a Rodrigo vino del profesor Juan Mata. "Querido Juan, damos por satisfactoriamente cumplido este compromiso debido con la magnífica escritora y gran mujer que es Antonina Rodrigo y, a través de ella, con la literatura comprometida escrita por mujeres y sobre mujeres", expresó Aranda.

"El trabajo de la excelentísima Antonina Rodrigo es, en definitiva, un compendio de compromiso feminista y social, de recuperación de memoria y de reconocimiento de tantas mujeres olvidadas" o arrinconadas, expuso la rectora. "Nuestra nueva  doctora honoris causa representa lo mejor que la Universidad puede y debe ofrecer a la sociedad: el rigor y la excelencia científica, el compromiso con el progreso y el bienestar de la sociedad", completó la máxima responsable de la institución universitaria.

Antonina Rodrigo García es la décima mujer que recibe el Doctorado Honoris Causa por la Universidad de Granada. Se han otorgado 124 en total, 114 hombres y 10 mujeres desde que se empezó a conceder estas distinciones en 1957. La primera Doctora Honoris Causa por la Universidad de Granada fue la arabista e historiadora Rachel Arié en 1988, y la segunda la historiadora Mary Nash en 2010, recordó la UGR en un comunicado de prensa.