Armilla más Nevada igual a empleo

La Fiscalía Provincial va a recurrir ante la Audiencia de Granada la sentencia por la tramitación irregular del Centro Comercial Nevada. En los próximos días se presentará el recurso de apelación al fallo del Juzgado de lo Penal 3 de Granada, que dista mucho de la solicitud que formuló el fiscal encargado del caso, que pidió la demolición total del Nevada y penas de cárcel para los políticos.

Mientras, en Armilla, la sentencia ha servido de comentario entre los vecinos. Armilla+Nevada=Empleos. Con esta sencilla operación matemática se podría resumir la opinión de gran parte de los vecinos. Son muchos los 'votos' a favor de que las obras del centro concluyan y abra sus puertas una vez emitida la sentencia penal, que ha condenado a una cuarta parte de los acusados a pequeñas penas de prisión y a que se derribe sólo una esquina de la edificación que habría invadido zonas verdes. En total, no llega a 1.500 metros, un castigo que para algunos armilleros preguntados por este diario no justifica el tiempo que ha estado paralizado.

"Si demuelen un trozo pero luego el resto del parque funciona como tiene que funcionar, yo creo que es justo; lo que hace falta es que se termine y empiecen a crearse puestos de trabajo", considera María José Bargues, propietaria desde hace 13 años de la cervecería La Abadía de Armilla. Para ella, si demoler un trozo significa ponerlo en marcha está "de acuerdo", aunque no sabe si les va a afectar negativamente. Cuando esta empresaria supo que Olivo iba a levantar el Nevada se interesó por el proyecto y barajó mudar su establecimiento allí, pero pronto desistió. "Cuando presentaron la maqueta me fui a La Cañada de Marbella, que también es de Olivo, a interesarme, pero se me quitaron las ganas porque me dijeron que los alquileres eran altísimos, así como que luego tú no puedes hace las reformas que quieras sin la autorización correspondiente".

Al igual que esta hostelera, otros lugareños creen que ahora el Ayuntamiento debe apoyar a la gente que está parada para que sean los primeros que entren a trabajar. También confían en que el edificio sirva de imán, pues será la superficie comercial más grande de Andalucía y la quinta de Europa.

Ignacio Abella es camarero y está totalmente a favor de su apertura. "Después de llevar muchos años trabajando en la hostelería y ser titulado en Restauración he estado seis meses en el paro antes de volver a trabajar ahora; espero que abran pronto y así se fomente el empleo", subraya. Abella desconoce la sentencia pero sí sabe que se ha ordenado que se tire una esquina.

Quien conoce hasta los metros cuadrados que se han ordenado derribar es Miguel Ángel Cano, propietario de la ferretería El Kuky. "Lo primero que hay que hacer es ser creyente de la Justicia y, como lo soy, creo en la sentencia y creo que hay que acatarla", señala este empresario, que piensa, no obstante, que se ha procedido "muy lento y muy tarde" y que se ha perdido demasiado tiempo. Las opiniones que escucha de los vecinos son variadas. "Armilla es un pueblo muy dividido políticamente", afirma Cano, que no teme perder clientela con la apertura del Nevada. "Vendrá seguro un gran almacén de ferretería, pero personalmente a mi negocio no le va a afectar porque es un negocio de barrio y porque es mío, me ponga donde me ponga y lo que me pongan alrededor".

Uno de sus clientes, José María Cabañas, es empleado de una empresa dedicada a la construcción y piensa que "a la ley hay que respetarla y punto; pero lo que no se puede consentir es que una vez que está la Catedral hecha ahora le quiten la torre". En este sentido, considera que quienes están pagando el pato "son un montón de padres de familia" sin posibilidad de trabajar, y "todo para tirar una esquinita y salir con un triunfo político". Para él, el desenlace de este caso ha sido a su juicio "absurdo".

Olivo fue "jefe" de Ildefonso García, uno de los pintores que trabajaron en el centro comercial antes de su paralización en abril de 2007. Este profesional, que pintó todas las cocheras del Nevada, ve "muy mal" que hayan ordenado tirar la esquina suroeste. "Allí no estorba ni a la autovía ni a nada", dice, al tiempo que se muestra convencido de que el centro comercial es "legal" y por ello "debe quedarse como está". García, vecino de Armilla de toda la vida, cree que la supuesta implicación de Olivo en el caso Malaya de Marbella ha podido influir para que haya sido puesto en el punto de mira.

José Fernández trabaja en la Funeraria Fermín Criado de Armilla. Es vecino del pueblo y cree también que se debe de abrir "por los puestos de trabajo". Como todos, se enteró de los extremos de la sentencia la semana pasada por la prensa y cree que "si el Nevada no está bien construido, tendrán que arreglarlo". Por su parte, para Antonio Toro, empleado del Ayuntamiento de Armilla desde hace más de diez años, el Nevada "tendría que estar abierto hoy mismo".

Carmen Linde es vecina de La Zubia, aunque pasa la mayoría del día en Armilla, donde tiene la cafetería Malín desde 1996. En su opinión, tras haber hecho una inversión tan grande, lo lógico es "que tiren lo que tengan que tirar y abran de una vez", pues "es una lástima que esté eso parado con la de millones que se han invertido y con la riqueza que generará, aunque a los pequeños empresarios nos pueda perjudicar".

Ha habido bastantes personas del municipio que han preferido guardar silencio por distintos motivos: por estar ya cansadas del caso Nevada, por tener algún tipo de vinculación con los políticos locales o simplemente por apatía.

Ahora, una vez conocida una primera opinión judicial sobre el Nevada, la del magistrado de Penal 3, Antonio Aguilera, habrá que esperar a que se pronuncie la Audiencia provincial de Granada, que tardará aún meses en resolver los recursos. La fecha, por tanto de apertura del centro de Olivo, dependerá de lo que tarden en aterrizar las apelaciones en las mesas de los magistrados de Plaza Nueva y en ser analizadas, aunque hay quien asegura con tono irónico que "seguro que abrirá coincidiendo con las elecciones".