Atascos y colisiones se apuntan a la normalidad

La llegada del mes de septiembre trae consigo la vuelta a la ciudad de muchas personas a las que se les acaba el fin del periodo vacacional estival, con la consiguiente vuelta a la rutina. El coche particular recupera de nuevo una función de transporte para cuestiones laborales, transporte de niños a centros escolares o de desplazamientos para llenar la nevera o comprar los materiales de la vuelta al cole de pequeños.

Toda esta vuelta a la normalidad ha traído consigo un aumento de los desplazamientos de corta y media distancia por carretera en Granada capital, que han acabado con la tranquilidad que reinaba en las vías granadinas en el verano.

Las principales retenciones se producían, como viene siendo habitual en cada día laborable en la capital, a primeras horas de la jornada, con circulación lenta e intermitente en la zona de la circunvalación de Granada (autovía A-44), destacando pequeños atascos en los accesos a Recogidas, Méndez Nuñez, Avenida Fernando de los Rios/Armilla y PTS. Estas mismas se volvían a producir en las mismas salidas de la circunvalación a las horas de la vuelta de trabajar, es decir, coincidiendo con el mediodía (en torno a las 15 horas) y a media tarde (en torno a las 20 horas).

Precisamente en el umbral de las 20 horas se producía en la circunvalación un alcance entre dos vehículos, a la altura de El Fargue, que ocasionaba daños materiales y que dejaba grandes retenciones a partir del punto kilométrico 103 en dirección Motril.

A su vez, la circulación era lenta en el centro de la capital. Acera del Darro, Recogidas y Camino de Ronda volvían a sufrir las retenciones derivadas de una mayor presencia de tráfico. Un accidente, en torno a las 13:50 horas limitaba la circulación en este último, en el cruce con la calle Agustina de Aragón. No hubo que lamentar daños personales.

El tránsito del transporte público también se veía afectado por el aumento del tráfico rodado en Granada y en los municipios colindantes a la capital. Algunas líneas de autobuses sufrían retrasos en su circulación, con el consiguiente enfado de los usuarios, y los carriles bus eran invadidos en ocasiones por vehículos, ocasionando paradas no programadas. A esto hay que sumar las pruebas del Metro de Granada, que aún continúan, y que siempre dejan incidencias en la capital. Ayer se registraron varios frenazos del tranvía en cruces y rotondas, sin que hubiera que lamentar ningún alcance del Metro ligero a vehículos.