El Ayuntamiento de Granada pondrá en marcha en septiembre el Consejo Sectorial del Comercio, un órgano con el que pretende dinamizar el sector, atender su problemática y crear hasta 3.000 nuevos negocios durante este mandato. Un "pacto local por el comercio" para favorecer la actividad en la ciudad, que cuenta con 12.000 negocios abiertos.

En este consejo se consensuarán todas las medidas a adoptar respecto al comercio y su futuro en la ciudad y se plantearán medidas como que las licencias de reforma se deleguen en el Ayuntamiento y no en Cultura para agilizar las aperturas en el centro histórico, adaptarse a las nuevas tecnologías o crear una logística de reparto a domicilio. 

Además, se promoverá la productividad, se luchará contra la venta ilegal, se coordinarán con otras áreas municipales medidas fiscales para favorecer el emprendimiento y se estudiará la implantación de un comercio de lujo para atraer a los turistas. También se pondrá sobre la mesa medidas complementarias para favorecer el tránsito de posible clientes como rutas culturales, turísticas, iluminación de edificios...

También se tratarán otras medidas de regulación del sector como el diseño y la ordenación de vía pública por parte del comercio. Según el concejal de Comercio, Manuel Olivares, "es injusto que pague la hostelería por sus terrazas o sillas en la vía pública y no lo haga un comercio que saca su material". Por eso, se pondrá sobre la mesa el cobro de esta tasa a los comercio, que sería, según ha matizado Olivares, en función del negocio, material expuesto, ingresos... Lo que quieren con la misma es homogeneizar esta situación entre hosteleros y comerciantes.

Además, el concejal asegura que hay que "huir de la confrontación con las grandes superficies". "Al revés, lo que hay que hacer es embellecer nuestro centro comercial, el comercio de barrio, y que sea más atractivo para el cliente.

Olivares se ha hecho eco de la situación crítica del comercio local tras mantener una reunión con la Federación Provincial de Comercio. "Estamos en una situación que no se vivía desde la crisis 2010-2012. Los comercios cierran y eso causa desempleo, menos consumo...". Según el concejal, en los últimos años han cerrado hasta 4.000 negocios.

Las zonas más vulnerables son el centro histórico, Camino de Ronda, Zaidín-Vergeles, Chana y Beiro, por lo que quieren que las decisiones que se tomen en ese consejo beneficien a todo el comercio de la ciudad. "El objetivo es llegar a superar los 15.000 negocios este mandato frente a los 12.000 que hay ahora", informa Olivares.

En el Consejo quieren contar con todos los grupos políticos, a los que pedirán que elijan los actores que participen en el mismo. "Para no politizarlo les vamos a exigir a cada uno una memoria de actividad, que detallen el volumen del colectivo al que representan y que estén al corriente de sus obligaciones", ha matizado el concejal, que asegura que en septiembre quieren tener la primera de las reuniones, de las que se irán informando con acta pública en pro de la "transparencia". Lo primer que harán es un "diagnóstico" de la situación.

"Queremos tomar acciones para que el comerciante se sienta seguro. Se trabajará de la mano. Se trata de competir y de ganar haciendo un centro comercial abierto apetecible", ha apuntado.