Un año después de su adquisición, la Universidad de Granada da los últimos detalles al plan director que definirá qué será de la Azucarera de San Isidro. El centro industrial en la Vega de Granada será un centro de innovación científica y cultural que pretende conformar un nuevo campus universitario. Antes de que esto sea así, será necesario acometer una profunda reforma que se planteará, precisamente, en el plan director. El documento que servirá de hoja de ruta para recuperar este inmueble del patrimonio granadino se expondrá en el mes de enero en el Crucero del Hospital Real, sede del Rectorado de la Universidad de Granada (UGR), según anunció la rectora, Pilar Aranda, en la visita a las obras que se acometen en el edificio.

En el diseño del plan director ha intervenido, explicó Aranda, la Consejería de Fomento, Ordenación del Territorio y Vivienda de la Junta. También se ha analizado con técnicos municipales, con los que se ha visto la necesidad de, entre otras cuestiones, llevar hasta la zona líneas de transporte público. 

No se ha cerrado la fecha de la muestra en la que se expondrá el plan director de San Isidro, que irá acompañada de "lo que ha representado la Azucarera en la ciudad de Granada, en la provincia", añadió la rectora, que recordó que el inmueble está catalogado como uno de los cien mejores edificios industriales a nivel nacional. La rectora recordó que esa consideración, el valor del edificio, "también fue algo que nos animó" a finalmente cerrar la adquisición del centro "porque vimos las posibilidades".

Cuando se acometan las obras, en San Isidro se instalarán grupos investigadores que desarrollan trabajos relacionados con el medio ambiente y la sostenibilidad, área en la que la UGR es puntera gracias a las décadas de investigación sobre entornos como Sierra Nevada. Se prevé también un espacio cultural. Todos esos usos se definirán en el plan director, que se prevé que pueda estar "en diciembre", ya que, dijo la rectora, un equipo de 50 personas "está trabajando intensamente" en el mismo junto con la Unidad Técnica y el Vicerrectorado de Extensión Universitaria y Patrimonio.

En estos meses la Universidad de Granada ha acometido obras de emergencia en la Azucarera. La máxima responsable de la institución reseñó que la UGR recibió una resolución del Ayuntamiento por el que se instaba a actuar para atajar los daños provocados por el enjambre sísmico que comenzó en enero de 2021- "Había que hacer tres actuaciones", recordó la rectora, que enumeró las reformas realizadas: una en la chimenea, otra en el tejado de la capilla y la tercera, en la torre de la alcoholera. "Estamos abordándolas ahora mismo", subrayó.

La idea de la Universidad es crear en ese entorno "una ciudad dentro de la ciudad". En un primer pago, se desembolsó 1,3 millones para hacerse con esta propiedad. Finalmente, se abonaron 2,7 millones por los 87.000 metros cuadrados. El proyecto de la Azucarera es uno de los presentados por la UGR dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. El primer grupo de investigación que ocupará estas instalaciones será el proyecto que trabaja en la recuperación de las choperas de la Vega.