Granada

De CajaGranada a Mare Nostrum

  • La entidad financiera vive este jueves el día más importante de su centenaria historia: su asamblea general ratifica, de forma definitiva, la fusión fría con Caja Murcia, Caixa Penedés y Sa Nostra · El grupo resultante tendrá vida propia a partir de enero de 2011

Hace 118 años que se constituyó la primera caja de ahorros granadina y la entidad resultante de más de un siglo de vicisitudes, CajaGranada, vive este jueves el día más importante de su historia.

A las cinco de la tarde comienza una asamblea general ordinaria con diez puntos en el orden del día. Todos son casi de trámite excepto el séptimo, presentado así: "Examen y aprobación, en su caso, de la integración en el Grupo Banco Mare Nostrum a crear por CajaGranada, Caja Murcia, Caixa Penedés y Sa Nostra".

El mismo día, a la misma hora y con el mismo fin, Caja Murcia, Caixa Penedés y Sa Nostra también celebran una asamblea general, en una clara demostración de lo que significa la expresión sincronizar los relojes.

En las manos de los 155 consejeros que componen la asamblea general granadina está la decisión final, que con toda seguridad será la de apoyar la llamada fusión fría con las tres citadas entidades financieras del arco mediterráneo. La única duda es saber si será por unanimidad, como la hubo en el Consejo de Administración del pasado 30 de junio, o si habrá alguna abstención, como ocurrió en el del 2 de junio.

Será poca cosa, en todo caso. Quizás algún representante de IU o de CCOO que quiera seguir las directrices que tomaron ambas organizaciones -a nivel andaluz, no granadino- cuando la Junta lanzó el órdago de la caja única andaluza -o la gran caja andaluza, que de las dos formas se dijo, aunque no es lo mismo lo uno que lo otro-, pero aun así se superaría sobradamente los 101 votos favorables que representan los dos tercios de la asamblea y que ratificarán, ya de forma definitiva, la integración en Mare Nostrum.

En CajaGranada hay un ambiente de tranquilidad y normalidad en las vísperas. El Banco de España ya dio su bendición a la alianza el 29 de junio y el Ministerio de Economía tampoco puso inconveniente alguno. Es más: presentó la fusión fría de CajaGranada como un modelo a seguir.

Ambos organismos tendrán que pronunciarse de nuevo tras la asamblea y también habrá de hacerlo la Junta de Andalucía, cuyo dictamen podría ser el único foco de preocupación, pero no lo es porque la situación, ahora, es radicalmente distinta a la que se vivió poco antes de que entrara el verano.

Por entonces, el ejecutivo que preside José Antonio Griñán tenía en mente una operación ambiciosa y a varias bandas que finalmente ha quedado en nada. Ni logró que Unicaja absorbiera a Cajasur, ni que la entidad malagueña, en colaboración con Cajasol, ganaran en la puja por lo que quedaba de la caja cordobesa, ni tampoco que Unicaja y Cajasol se fusionaran. Y por supuesto, fracasó en su intento de que CajaGranada se sumara a esa alianza andaluza.

Actuó tarde, cuando Antonio Jara y su equipo ya estaban mirando al Mediterráneo, y sus presiones no medraron al presidente del ente granadino. Finalmente tuvo que ser el propio Banco de España el que recomendara a Griñán que cesara en su hostigamiento porque lo que estaba en juego era bastante más que una fusión; era la propia estabilidad del maltrecho sistema financiero español.

El presidente andaluz terminó por desistir, pero en el camino, él y varios de sus colaboradores cercanos -fundamentalmente el consejero de Economía, Antonio Ávila, y el secretario de Organización del PSOE-A, Rafael Velasco- se significaron con declaraciones con las que, por decirlo de manera suave, no hicieron muchos amigos en Granada. Por todo eso, la Junta no va a emitir un informe negativo.

El Grupo Mare Nostrum, que sólo funcionará como banco en las sucursales que las cuatro entidades tenían en Madrid y mantendrá su idiosincracia en los territorios donde habían operado hasta hora, será una realidad a principios de 2011. Con un poco de suerte, si los dictámenes de las tres instituciones aludidas llegan antes, incluso a finales de 2010. El proceso está por tanto a punto de finalizar, y en este punto quizás haría falta volver la vista atrás, aunque tampoco demasiado, para recordar su génesis.

El 17 de septiembre de 2009, PP y PSOE acuerdan que Antonio Jara sea quien releve a Antonio María Claret al frente de CajaGranada. Jara llega con un mensaje tan claro como el de su antecesor: nada de fusiones. Pero sí se abre a otras posibilidades, a "alianzas estratégicas" que permitieran a la caja mantener su autonomía pero evitaran su aislamiento. Para seguir siendo fuertes hay que crecer, advierte.

En abril de 2010, culminado el proceso de renovación de los órganos de gobierno, CajaGranada desvela que mantiene contactos con Cajastur, Caja Murcia, Caixa Baleares y Caja Cantabria. Es la alianza estratégica de la que habló, y que en esos momentos se hace más necesaria que nunca porque el Banco de España ha urgido a las cajas españolas a llegar a acuerdos para no ser tantas, porque el sistema financiero no soporta más la situación.

En los días siguientes se producen ciertos movimientos y cambios de socios, pero lo esencial se mantiene: CajaGranada emprende el camino de la colaboración pero sin perder ni su identidad, ni su obra social ni, por supuesto, su vinculación con Granada y Andalucía. Fin de la historia. Ahora comienza otra.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios