El Cubillas, un 'laboratorio' contra la sedimentación

La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir inició ayer un estudio piloto en el embalse de Cubillas para valorar alternativas contra el problema de sedimentación que se viene produciendo, con carácter general, en los embalses. Para ello, se están tomando muestras de los sedimentos del Cubillas y, a continuación, se realizará su caracterización físico-química en laboratorio. De este modo, se pone en marcha el estudio de las necesidades existentes para la extracción de estos sedimentos, así como de los posteriores usos que se puedan hacer de los mismos.

Los trabajos, que cuentan con la colaboración del Centro de Estudios Experimentales y el Comité Nacional Español de Grandes Presas, suponen un punto de partida para la elaboración de una propuesta internacional, liderada por España y que cuenta con la participación de Polonia, Italia, Portugal y Chile, que se enmarcará en el Programa Marco de Investigación e Innovación de la Unión Europea, Horizonte 2020, y que supondría la intervención en los embalses que presenten estas necesidades de extracción.

El objetivo del proyecto es ofrecer una solución al problema de la creciente sedimentación que se está produciendo en los ríos y embalses, especialmente en los países mediterráneos, a causa del incremento de los procesos erosivos del suelo. La erosión es un fenómeno natural que se está viendo acentuado a causa de una explotación intensiva del suelo, especialmente por parte de determinados cultivos, como por ejemplo el olivar.

Este fenómeno supone un arrastre cada vez más elevado de materiales sueltos del terreno a los ríos y arroyos por los que discurren hasta sedimentarse en los embalses, en los que de forma inversamente proporcional se produce una paulatina reducción de su capacidad de almacenamiento.

En este sentido, el presente proyecto pretende dar una solución al problema de la colmatación de los embalses, con la idea de extraer los sedimentos y reintegrarlos en el ecosistema fluvial. Para ello, se van a caracterizar los sedimentos existentes, se desarrollarán prototipos de extracción innovadores, se valorarán económica y ambientalmente y se propondrán normativas para la gobernanza de la relación entre agua y sedimento.