La DGT recauda 6.453 euros al día por exceso de velocidad en las carreteras granadinas

Fijos o móviles. A simple vista o bien camuflados. Con señalización o sin ella. En autovías, carreteras principales o en secundarias. Hay muchos tipos y formas diferentes para controlar cuándo los conductores pisan de más el acelerador. En España, la infracción de tráfico más cometida es exceder la velocidad permitida, hasta el punto que el pasado 2016 la DGT emitió 4.369.603 denuncias de este tipo, lo que supuso una recaudación de 164.206.233,66 euros, un incremento de más de 34 millones de euros en comparación con los dos años anteriores.

Andalucía fue la comunidad autónoma que contó con más multas por exceso de velocidad, con más de un millón de denuncias, número que se traduce en más de 36 millones de euros recaudados. Al igual que ocurre en el resto del país, las multas por exceso de velocidad son la infracción de tráfico más cometida por los granadinos.

Durante 2016, la DGT registró un total de 85.370 denuncias en Granada, de las que 40.896 fueron impuestas por los conocidos radares de tráfico. Pero ¿cuánto dinero se recaudó por este tipo de sanción durante el 2016 en la provincia? Nada más y nada menos que 6.453 euros al día, lo que supuso un total de 2.355.355,04 euros durante todo el 2016.

Como también ocurre en el resto de provincias de España, Granada cuenta con varios cinemómetros -nombre con el que se denomina a los radares de velocidad- instalados de forma permanente por la provincia. En total son 14 dispositivos que se reparten por todo el mapa que componen las carreteras granadinas, pero a ellos hay que sumar los llamados 'radares móviles', que se sitúan de forma esporádica en distintos puntos de las vías y que hacen que la cifra total de cinemómetros de Granada ascienda hasta los 45.

Precisamente, es este último tipo de radar el que más número denuncias emite cada año, una cifra que el pasado 2016 ascendió a 25.225, de las que 7.624 fueron interpuestas por el llamado radar móvil con parada, es decir, en el que se da el alto al conductor que ha cometido la infracción para imponerle la multa in situ, mientras que 17.601 corrieron a cargo de los radar móvil sin parada. Todo ello, supuso un total de 1.713.257,73 euros, que se dividen en 570.893,43 euros recaudados por los primeros -con parada-, y 1.142.364,28 por los radar sin parada.

A estos números hay que sumar las denuncias impuestas por los cinemómetro fijos, cuya cifra fue de 15.671 multas, y un total de 642.097,31 euros de recaudación, de las que 10.529 denuncias fueron impuestas por el radar situado en el punto kilométrico (PK) 9,200 de la A-92 N, en sentido creciente.

Si se realiza la media mensual de cuántos euros fueron recaudados por la DGT en la provincia durante el pasado 2016, la cifra a simple vista es bastante alta, pues se traduciría en 196.279,59 euros cada mes. En cambio, si se realiza la media diaria, el impacto parece aún mayor, ya que fueron 6.453,03 euros los que se recaudaron de media cada día durante el pasado año. Pese a ello, en 2016 se redujo la cifra total de infracciones en comparación con el mismo periodo de 2015.

Durante los últimos cinco años, el número de sanciones ha ido en aumento, teniendo su pico más alto en 2015. En 2012, hubo un total de 26.953 denuncias por exceso de velocidad y una recaudación total de 2.015.951,35 euros. Estas cifras se desglosan en 10.042 multas impuestas por radar móvil con parada -981.521 euros recaudados-, 6.821 denuncias por cinemómetro móvil sin parada -483.216,96 euros-, 10.090 por radar fijo, con 551.213,07 euros, entre los que destacó el situado en el PK 358,900 de la N-340, con 4.135 denuncias.

En 2013, en total se emitieron 32.933 denuncias -que supuso 2.394.016,02 euros de recaudación-, sin embargo, este año se produjo un descenso en las infracciones registradas por radar fijo, donde se contabilizaron 6.725 -al igual que el año anterior, el radar que más infracciones contabilizó fue el del PK 358,900 de la N-340 con 3.243-, mientras que los radares móvil, tanto con parada como sin parada, registraron un aumento, se contabilizaron 15.908 y 7.906 denuncias respectivamente.

El año 2014 -contó con un total de 34.776 denuncias, cifra que supuso una recaudación de 2.897.903,38 euros- se caracterizó como el periodo en el que los radares fijos de la provincia contabilizaron el menor número de denuncias de los últimos años, con 2.595 -de las que 1.872 fueron impuestas por el radar del PK 132,800 de la A-44-, un total de 149.912,35 euros, al igual que también descendieron las multas impuestas por cinemómetro móvil con parada, con 10.517, y 1.035.331,75 euros. Todo lo contrario que sucedió con los radares móviles sin parada, que alcanzaron la cifra de 21.664 denuncias, lo que supuso 1.712.659,28 euros.

Sin embargo, en 2015 el número de denuncias alcanzó su pico más alto con 47.567, y 3.421.272,39 euros, cifras que se desglosan en 7.395 infracciones contabilizadas por radar móvil con parada -630.298,21 euros-, 26.872 por cinemómetro móvil sin parada -2.115379,59 euros-, y 13.300 denuncias por radar fijo -675.594,59 euros-, de las que 5.072 fueron impuestas por el cinemómetro situado en el PK 132,800 de la A-44. Este aumento se debe a la modificación que se produjo durante este año del plan de gestión de la velocidad en las carreteras españolas, mediante el cual se decidió instalar los cinemómetros móviles también en las vías secundarias.

En cambio, esos números volvieron a reducirse en 2016, periodo en el que pese a que el número total de multas fue de 40.896, se consiguió la menor recaudación de los últimos cuatro años, con 2.355.355,04 euros.

Los datos del primer trimestre de 2017 también son esperanzadores, pues en total se han recogido 7.626 denuncias, un total de 288.400 euros, siendo el radar fijo del PK 12,300 de la A-395 el que más infracciones ha contabilizado durante los tres primeros meses de este año, con un total de 932. De mantenerse estas cifras durante todo el 2017, volvería a reducirse el número de sanciones impuestas por exceso de velocidad en la provincia granadina, pero, ¿en qué consisten realmente estas multas de tráfico?

Al contrario de lo que sucede con otro tipo de sanciones, en las que finalmente suele ser un juez quien decide cuál será la pena a cumplir por el infractor, las multas por exceso de velocidad se imponen a raíz de una tabla elaborada por la DGT en el año 2010, en función del tipo de agravante: grave o muy grave.

Se considera una infracción grave por exceso de velocidad aquella en la que se supera entre 1 y 50 kilómetros/hora la velocidad máxima permitida para las vías de 30, 40 y 50 km/h; y entre 1 y 70 kilómetros/hora, para las que marcan una velocidad límite de 60, 70, 80, 90, 100, 110 y 120 km/h. En estos casos, la sanción iría desde los 100 euros hasta los 500, así como la sustracción de hasta 6 puntos del carné.

Si la infracción es considerada de carácter muy grave -aquella en la que se superan los excesos del agravante anterior-, la sanción será una multa de 600 euros, así como la sustracción de 6 puntos del carné.

Pese a ello, cabe destacar que existen otros agravantes que pueden aumentar este tipo de sanciones, como sería no llevar el cinturón de seguridad o el sistema adecuado de retención infantil, haber extralimitado la velocidad permitida al conducir bajo efectos del alcohol y drogas, o realizar maniobras ilegales durante la conducción.