El Parque Periurbano Dehesa del Generalife acogió ayer un simulacro de incendio nivel uno. Fue como parte de las acciones previstas en el Plan de Emergencia por Incendios Forestales de Andalucía, que tiene como fin "ensayar protocolos y poder anticipar a las posibles incendios que puedan producirse en una emergencia real".

La delegada de Medio Ambiente de la Junta en Granada, Inmaculada Oria, visitó el Puesto de Mando Avanzado instalado en el Llano de la Perdiz, desde donde el dispositivo del Infoca y Emergencias del 112 dirigieron las operaciones y prácticas en las que participaron voluntarios de Protección Civil, miembros del Grupo de Emergencias de Andalucía Oriental, Parque de Bomberos de Granada, Policía Local y Autonómica, y Agentes de Medio Ambiente, entre otros.

Oria subrayó la importancia de los simulacros, "porque con ellos se evalúa la operatividad del Plan respecto a las prestaciones previstas, y sobre todo ayudan a tomar medidas correctoras pertinentes, revisando su operatividad, si fuese necesario ante un incendio forestal nivel uno con afección a infraestructuras públicas".

El simulacro de incendio llevado a cabo, en el que participaron como observadores alumnos del instituto Federico García Lorca de Churriana de la Vega, pertenecientes al modulo de FP de recurso naturales, fue específico de nivel uno, que son aquellos incendios en los que "por su posible evolución, se prevé la necesidad de la puesta en práctica de medidas especiales para la protección de las personas y de los bienes que puedan verse afectados por el fuego".

Según detalló Oria, llevar a cabo un simulacro de este tipo "es esencial porque participan distintos operativos y es imprescindible la coordinación de los mismos". La delegada de Medio Ambiente no perdió la ocasión para agradecer "la participación e implicación" de todas las personas tomaron parte en los distintos ejercicios y prácticas realizadas.