Desescalada en Granada: hoy vuelven los exámenes de autoescuela

La desescalada cada vez es más palpable en la provincia de Granada al vivir esta semana el inicio de la tercera fase. Entre las novedades, como la vuelta de los pubs y discotecas o los viajes entre provincias, se encuentra el regreso de los exámenes de autoescuela.

“Se habían olvidado de este sector. Hasta el pasado sábado desconocíamos nuestra situación: cuándo y cómo íbamos a empezar”, declara el presidente de la Asociación Provincial de Autoescuelas de Granada (APAG), José Blas Valero. Sin embargo, ya conocidas las condiciones, las academias han abierto sus puertas y arrancado sus coches.

Para garantizar la seguridad sanitaria, tanto en las aulas como en los vehículos, la Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE) ha elaborado un protocolo de actuación COVID-19 que se desarrollará en todos los centros de Formación Vial asociados. Consensuado con las organizaciones sindicales CCOO, USO y UGT, el documento se actualizará conforme vaya evolucionando la normativa.

Hasta el momento, el protocolo recoge las medidas de seguridad exigidas y recomendadas: uso obligatorio de mascarillas, desinfección de manos y limpieza del aula y coche. Además, se complementa con una cartelería al objeto de indicar la ubicación del gel hidroalcohólico y recordar la distancia de dos metros, en el caso del aula, e informar de la necesidad de las mascarillas en el coche.

Durante la segunda fase, en la que ya se permitía la apertura de las aulas, la capacidad se restringía al 30% de aforo, lo que significaba una estimación de 9 personas. El paso a la fase tres ha aumentado el porcentaje al 50%, sin embargo, la CNAE ha solicitado subir la ocupación hasta un 75%. Una vez en fase cuatro, se desarrollará la nueva normalidad que supondrá la permisión de un aforo completo.

En el coche, la seguridad se mantiene con el uso de mascarillas y la desinfección tras la salida o llegada de un ocupante. Se ha prescindido del uso de máquina de ozono ya que no se ha demostrado la eficacia de estas en los vehículos. La principal novedad reside en la única presencia de alumno, profesor y examinador durante la evaluación, ya que, como se sabe, en ocasiones otro alumno asistía en la parte trasera.

Los exámenes prácticos se retoman hoy mismo, 8 de junio, mientras que las pruebas teóricas ya comenzaron la semana pasada, pues, durante el confinamiento, la Confederación Nacional de Autoescuelas ha impartido clases online gratuitas a tiempo real a todos los alumnos de las academias asociadas, acción que ha evitado la deserción de algunos de ellos.

Sin embargo, como consecuencia de la crisis provocada por la COVID-19, no se descarta que alumnos matriculados tengan que abandonar el estudio por el coste económico que pueda suponerles. “Por el momento continuaré con las clases que comencé antes del confinamiento, pero sí tengo amigos que tendrán que dejarlo porque sus padres están en ERTE”, comenta un alumno.

Conforme pasen los días, serán más notables los vehículos de autoescuela que ya circulan por Granada. Por el momento, este sector ha retomado su actividad en toda España a excepción de aquellas comunidades cuyos territorios se encuentran en fase uno: Castilla y León, Madrid y Barcelona.

El plan CAPA, ¿solución a la problemática situación?

Es cierto que el confinamiento ha afectado al desarrollo de toda actividad en el país, sin embargo, las autoescuelas ya sufrían anteriormente “una situación endémica por la falta de examinadores”, como confirma José Blas Valero.

El 14 de marzo, con la declaración del Estado de Alarma, las autoescuelas cerraron sin poder examinar en Granada a dos grupos de alumnos correspondientes a la zona de Loja, Motril, Baza y Guadix. Estos serán evaluados hoy mismo, día de inicio de las evaluaciones prácticas.

Hasta entonces, la provincia de Granada quedaba dividida en cinco grupos con el fin de concentrar y desarrollar de forma eficiente las evaluaciones. Se distinguían los exámenes por la ciudad de los “desplazados”, aquellos efectuados en Motril, Loja, Baza y Guadix.

Desde hace un año, la Dirección General de Tráfico (DGT) venía impulsando un nuevo sistema de evaluación: el plan CAPA, acrónimo de Capacidad de las Pruebas de Aptitud. Este consiste en la asignación a cada autoescuela de un cupo de aspirantes al examen de circulación. El número se establece en función de la cantidad de alumnos que hayan aprobado la prueba teórica en ese centro de formación vial.

De esta manera, la jefatura comunica a la academia cuántos alumnos podrán optar al examen y el centro confirma su cita en menos de 24 horas. “La ventaja de este sistema es que ahora se conocerá con antelación el día exacto que tendrá lugar la evaluación. Esto permite organizarnos y trabajar con fluidez”, explica Valero.

Con el desarrollo de este sistema se eliminarán los cinco grupos establecidos, siendo ahora exámenes mixtos y frecuentes desarrollados tanto por la ciudad de Granada como por los pueblos. El plan CAPA, quien también genera controversias, puede convertirse en la solución a la falta de examinadores.