Donantes de 'vida' frente a la crisis

El ingenio sirve muchas veces más que otras medidas para salir de situaciones difíciles. Y ahora, con la crisis y la complicada situación económica de cada vez más personas hay que buscar alternativas de ingresos que permitan contar con algo más a final de mes. Y alternativas hay muchas. Una curiosa es la donación de óvulos y semen.

Las clínicas de reproducción están notando desde hace un par de meses un aumento de personas que acuden para entrar en un proceso de donación. La mayoría, además de por la intención de ayudar a parejas que tienen dificultad para concebir un hijo, llamadas por la remuneración económica que a modo de "gratificación por las molestias" se entrega. Aunque es muy distinto si se trata de un hombre o una mujer. En el caso de donación de ovocitos una vez concluido el proceso la gratificación ronda los 800 euros, una cantidad pactada entre todas las clínicas; mientras que en el caso de los hombres la donación de semen no es superior a los 40 o 50 euros cada vez.

Según la directora de la clínica de reproducción Mar&Gen, Carmen Mendoza, "estamos notando desde noviembre aproximadamente un aumento de mujeres que solicitan incluirse en el proceso, principalmente sudamericanas". La otra gran fuente de donantes está en las mujeres jóvenes y universitarias y les influye menos la crisis por lo que las cifras se mantienen.

"La donación es gratuita pero se gratifican las molestias que sufre la donante en cuanto a desplazamientos, tiempo y sobre todo posible pérdida de horas de trabajo, pues no hay que olvidar que la donación de ovocitos es un proceso largo y sacrificado, de tal forma que aproximadamente durante un mes la donante está casi plenamente ocupada en su preparación", asegura la experta, que apuesta incluso por aumentar, si la ley lo permitiera, esta gratificación por el sacrificio que realizan. "Muchas no lo saben y se sorprenden de que las gratifiques. Son geniales", apunta.

El caso de los hombres es similar en cuanto a aumento de la demanda pero distinto en el proceso y la gratificación. Según el doctor Juan Pablo Ramírez, del Centro de Estudio e Investigación de la Fertilidad de Granada, Ceifer, "la tendencia, aunque no hemos hecho aún las estadísticas, es que están aumentando los hombres que vienen a donar semen, algo que dentro de la situación nos viene bien ya que contamos con más reservas para procesos de fertilidad para parejas y mujeres que quieren quedarse embarazadas".

Para los hombres, la cantidad que reciben por cada donación (mucho más rápida y fácil que la de las mujeres) es de "aproximadamente 48 euros".

Así, en este momento de crisis, esta alternativa es positiva tanto para los donantes, que consiguen un ingreso extra, como para las clínicas y centros de reproducción, que consiguen más material para los procesos de fertilidad y fecundación que realizan. De hecho, son constantes las campañas para captar donantes, sobre todo de óvulos, que realizan los centros solicitando mujeres sanas que "ayuden" a otras a cumplir su sueño de ser madres.

En el caso de las mujeres, el requisito es tener de 18 a 35 años y no tener enfermedad hereditaria o genética. Tras una entrevista y distintos exámenes médicos (análisis de sangre, ecografía y cultivos vaginales" se procede a la estimulación para desarrollar varios óvulos y poder ser recuperados en quirófano. A los hombres también se les exige una edad y no tener enfermedades transmisibles. Primero se hace una prueba de semen para ver los valores (se gratifica con 20 euros) y si es positiva se realiza la donación.

Lo máximo permitido por la ley en ambos casos es que se consigan seis embarazos.