EPSA recibe 5.000 viviendas de la zona Norte para su rehabilitación

La transformación de la zona Norte está cada vez más cerca. El martes, el Consejo de Gobierno andaluz aprobará -si no hay imprevistos de última hora- la transferencia de la titularidad de las 4.590 viviendas de la Administración autonómica a la Empresa Pública de Suelo (EPSA). Este trámite supone dar un paso de gigante en los procesos de intervención en una de las zonas más deprimidas de la ciudad. "El cambio de la titularidad es importante porque implica que el equipo multidisciplinar que trabaja en la zona tiene más facilidades y más agilidad para actuar en el barrio ", explica el delegado de Obras Públicas de la Junta, Francisco Cuenca.

El traspaso de estas 4.590 viviendas de protección se suma a las 528 que EPSA ya tenía en su poder. Con todo el parque Norte transferido, Cuenca manifiesta que el primer trabajo que tienen es el de regularización administrativa, es decir, poner a nombre de la persona indicada la titularidad de la vivienda. Los históricos traspasos ilegales que se hicieron hace más de treinta años han creado un vacío legal que hay que organizar. "La regularización de las viviendas no sólo afecta a las de régimen de alquiler sino también en aquellas que se pueda hacer una transferencia de su propiedad a los inquilinos que viven en ellas", concreta Cuenca.

La importancia de este cambio de titularidad está estrechamente ligada con el nuevo Plan Integral de la Zona Norte, ya que el segundo paso previsto desde Obras Públicas es hacer un plan de intervención desde un punto de vista más coordinado. "Un equipo de trabajo multidisciplinar trabajará, de manera individual, con todas las familias". Y es que el papel de la vivienda en el desarrollo del barrio es fundamental. Cuenca matiza que los estudios a las familias se hacen para que la vivienda se adapte a ellas. "Hay pisos que se traspasaron para una familia de dos miembros y ahora son siete o, por ejemplo, hay situaciones de discapacidad que se pueden estudiar y solventar".

La intervención en las más de 5.000 viviendas no es tarea fácil, por eso, el delegado de Obras Públicas no habla de tiempos de ejecución cortos. "Es una labor compleja en todos los sentidos, técnica y social por eso no se terminará ni en uno, ni en dos, ni en seis años", apunta. Y añade que los vecinos no deben preocuparse de su futuro porque tienen previsto realojar a las familias que tengan que abandonar su vivienda porque su intervención sea más profunda.

Al margen de la rehabilitación, Francisco Cuenca manifiesta la expectativas que la Junta tiene puesta en la Zona Norte. "El que el Distribuidor Norte, la sede administrativa de la Junta de Andalucía y las grandes zonas comerciales se sitúen allí no es casual", apuntó el delegado, que agregó que "tampoco es fortuito el esfuerzo realizado por conseguir estas 5.000 viviendas nuevas".