Golpea a su mujer con un martillo horas antes del juicio de su divorcio

Agentes de la Policía Nacional detuvieron a primera hora de la tarde de ayer a un hombre que responde a las iniciales de F.T., tras agredir a su esposa en la vivienda de la calle Antillas en el barrio de San Antonio de Motril. La Policía Judicial investiga los hechos, aunque en principio todo apunta a que se trata de un nuevo caso de violencia de genero. El matrimonio, que no tenía hijos, se encontraba en trámites de separación. De hecho, precisamente hoy estaban citados en el palacio de justicia de la localidad costera para celebrar el juicio de divorcio.

Familiares de la víctima, Araceli M.B., de 60 años, se preocuparon al no acudir a la casa de sus parientes a almorzar como hacía habitualmente, por lo que intentaron comunicar telefónicamente con ella, sin que la mujer contestara el teléfono. Estas mismas fuentes añadieron que "en los primeros intentos el móvil indicaba llamada, mientras que ya en los últimos salía como si estuviera apagado o fuera de cobertura", lo que les hizo sospechar de que algo "raro" sucedía, por lo que decidieron ponerlo en conocimiento de la Policía, al tiempo que se acercaron a su casa, en el número 103 de la calle Antillas.

Sobre las tres y media de la tarde, los agentes entraron en el domicilio conyugal y pillaron al marido in fraganti golpeándola con un objeto contundente, según la Policía Nacional. Fuentes cercanas a la investigación señalaron que podría tratarse de un martillo.

En el interior de la vivienda se encontraba la mujer gravemente herida, con un fuerte traumatismo craneoencefálico severo por el que fue trasladada de inmediato al Hospital Comarcal Santa Ana de Motril, que se encuentra muy cerca del lugar de los hechos. No obstante, la gravedad de las heridas requirió que fuese trasladada al Hospital Traumatológico de Granada, donde fue intervenida.

Los policías procedieron asimismo a detener al marido. Los familiares, que en ese momento ya habían llegado a la casa, así como muchos vecinos que alarmados por la presencia policial habían salido a la calle, protagonizaron un intento de linchamiento del esposo, llevados por un arrebato. Uno de los allegados incluso confesó todavía consternado: "porque no nos han dejado los policías, si no lo matamos allí mismo".

Al lugar de los hechos se desplazó un fuerte despliegue policial, tanto de agentes del Cuerpo Nacional como varios coches patrulla de la Policía Local, así como varias ambulancias del 112.

Testigos presenciales indicaron que "la herida no llegó siquiera a entrar en la unidad de urgencias del hospital comarcal, ya que cuando fue atendida por el personal sanitario se dieron cuenta de pronóstico grave de las lesiones, por lo que desde la ambulancia fue conducida al helicóptero".

Una sobrina que acudió al domicilio conyugal, al comprobar lo que había sucedido, tuvo también que ser ingresada en el hospital por un ataque de ansiedad.

Araceli, que trabajaba como profesora en el Colegio Reina Fabiola, se jubiló en octubre del año pasado. Según informaron fuentes próximas a la familia, aunque el matrimonio estaba en trámites de separación seguían conviviendo bajo el mismo techo. "El marido era un abogado que apenas tenía casos y a partir de hoy se habría tenido que ir de la casa", señaló un amigo de la víctima.

Los familiares se preguntaban: "¿Cómo una mujer que se quiere separar de su marido tiene que convivir bajo el mismo techo que él?". Asimismo, lamentaban que después de más de un año de iniciar los trámites de separación el juez no hubiera dictado algún tipo de medidas cautelares para proteger a la víctima.

Araceli, por su profesión de maestra y edad, es una persona muy querida en Motril, ya que ha dado clase a varias generaciones de niños. Uno de sus ex compañeros en el colegio también señalaba que había sido una de las mejores profesoras de Primaria que había tenido la comarca.

La alcaldesa de Motril, Luisa García Chamorro, condenó enérgicamente el suceso de violencia de género. "Tanto su mujer como su pareja estaban siendo objeto de seguimiento desde el Centro de la Mujer del ayuntamiento de Motril. Los dos habían pedido asesoramiento jurídico y él además psicológico".