El nuevo año ha llegado a Granada cumpliendo los deseos de muchos ciudadanos de encontrar un trabajo. La provincia despide el año 2023 con una diferencia respecto a 2022 de más de 2.000 personas que han conseguido un empleo durante todo el año. La contratación de cara al inicio de la temporada navideña tiene buena parte de culpa, pero no es la única. Una buena tendencia que se mantiene desde hace un par de meses y que invita al optimismo de cara a los datos de 2024.

Según los datos publicados este miércoles por el Ministerio de Trabajo y Economía Social, la provincia registró en diciembre un total de 75.471 parados en Granada. Este dato es inferior al de 2022, cuando eran 77.658 quienes estaban en búsqueda activa de empleo. Por lo tanto, son 2.187 personas desempleadas menos que el año anterior. Una muy buena noticia para la provincia.

Pese a estos buenos datos, ya que siempre es una buena noticia que baje el número de personas buscando ocupación, la reducción del desempleo en el total del 2023 en la provincia ha sido inferior a la de Andalucía y España. Mientras que en Granada esta ha sido del -2,82%, en la comunidad andaluza el desempleo se ha reducido en un -4,42% y a nivel nacional en un -4,6%.

El mes de diciembre ha ayudado a reducir esa cifra de desempleados en la provincia, con la campaña de Navidad siendo una ayuda nuevamente. En total, el paro bajó en la provincia de Granada en 2.613 personas respecto a noviembre. Esto significa que la provincia ha sido el segundo territorio en el que más personas han encontrado trabajo. En cifras porcentuales, se redujo el empleo en un -3,35% en un solo mes.

La provincia de Cádiz lidera la mayor caída (-3.042), seguida de la ya mencionada Granada (-2.613), Jaén (-2.448), Sevilla (-2.217), Córdoba (-1.617), Málaga (-1.532), Huelva (-898). El paro bajó en todas las provincias andaluzas.

Al mismo tiempo, las afiliaciones a la Seguridad Social también han subido, registrándose un aumento del 1,45%, lo que en cifras absolutas supone 5.180 nuevas incorporaciones, cerrándose el año con 362.352 trabajadores en activo.

La contratación de la temporada navideña tiene buena parte de culpa, pues los Servicios vuelven a liderar la contratación en el último mes del año, como ya hicieran en noviembre. De esta forma, según los datos del Ministerio, el pasado mes se realizaron 2.072 nuevos contratos en este sector de la provincia, lo que deja la cifra de trabajadores en este sector en 50.394. Esta cifra supone una gran diferencia con el segundo sector que más trabajo da en la provincia, el de la Construcción (7.483), aunque fue en este en el que más personas perdieron su trabajo el mes pasado (132).

A mucha distancia se encuentran tanto la Agricultura, donde se firmaron 294 contratos (dejando un total de 5.610 empleados) y la Industria, con 19 nuevos contratos y 3.650 empleados totales. En el colectivo de "Sin empleo anterior", la provincia cuenta con 8.334 desempleados, 360 menos que en el mes pasado.

La mayoría de estos contratos han sido temporales, un 59,04%, aunque cada vez son más los indefinidos, que en la provincia suman ya 134.381, un 40,96% del total, incluyendo también aquellos que, bajo el amparo de la nueva ley, se han reconvertido a esta modalidad. 

Los datos del Ministerio de Trabajo también permiten esbozar un perfil del demandante de empleo en Granada. Así, por género, el paro en Granada es principalmente femenino, pues el 57,94% (43.725) de las registradas como demandantes de empleo es mujer, mientras que el 42,06% restante (31.746) es masculino. Pese a ello, la cifra de mujeres demandantes de empleo ha bajado ligeramente desde el mes pasado.

Reacciones

Tras conocerse los datos, el Secretario General de UGT Granada, Luis Miguel Gutiérrez, ha señalado que para dotar de fortaleza al mercado laboral granadino "es imprescindible reforzar la apuesta por la industrialización sostenible de la economía granadina, elevando el peso del sector secundario tanto en términos de actividad económica como de generación de empleo".

Respecto a las personas desempleadas, el ugetista denuncia que existe un volumen alto de vacantes, lo que se debe a tres elementos: "la precariedad de muchos puestos de trabajo ofertados, la falta de una intermediación pública potente que ponga a las personas buscando empleo en contacto con las empresas, y la carencia de unas políticas activas de empleo efectivas".

Por ello, para Gutiérrez, debería realizarse una profunda reforma de las políticas activas de empleo, "que propicie una mejor intermediación pública en la contratación y garantice unos servicios de orientación y seguimiento a la altura de las necesidades de las personas desempleadas, en especial las de larga duración". Por otro lado, considera que se deben reforzar las plantillas de los Servicios Públicos de Empleo, incluido el número de orientadores profesionales.

El secretario general de CCOO Granada, Daniel Mesa, ha asegurado que la provincia cierra 2023 "con la menor cifra de paro registrado en los últimos 15 años, y un total de 12.536 contratos indefinidos, tras dos ejercicios de vigencia de la reforma laboral y un aumento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) de 130 euros mensuales en el mismo periodo".

Para Mesa, los agentes sociales deben continuar en esta senda y "ahondar en las reformas que protegen los derechos laborales y el incremento del SMI, por su impacto positivo en la creación de empleo en la provincia".

Mesa ha aprovechado para un llamamiento a la Patronal a "poner las luces largas" y asumir un nuevo periodo de modernidad, porque "nadie quiere invertir en una economía basada en los bajos costes laborales". Para él, la provincia de Granada debe encarar su futuro desde un cambio en el modelo de relaciones laborales o no tendrá futuro, ya que la precariedad lastra el crecimiento y genera desigualdad.

Por su parte, la secretaria general de la Confederación Granadina de Empresarios (CGE), María Vera, ha celebrado los buenos datos laborales con los que la provincia ha cerrado el año, aplaudiendo la "resistencia" del empleo privado pese a un entorno económico complicado y marcado por la incertidumbre.

Vera apunta que "hay algunas señales de desgaste que preocupan al empresariado". Por un lado, se ha ralentizado el ritmo de caída del desempleo respecto a años anteriores. Y, por otro, el tradicional aumento de la afiliación de final de año ha sido bastante menos intenso que en ejercicios anteriores.

"La ralentización económica se va a dejar notar en las cifras laborales. Tenemos un 2024 complicado por delante, porque los problemas que amenazan la viabilidad de nuestras empresas no han desaparecido: elevada presión fiscal, incremento de los costes laborales, alza de los precios, dificultades de acceso al crédito o morosidad", ha explicado la secretaria general de la CGE, que también ha añadido la incertidumbre normativa como un nuevo factor de riesgo para las empresas y el empleo.