Aproximadamente cuatro enfermeras se tienen que ocupar de la salud de mil habitantes en Granada, es por eso que las profesionales están “en una situación límite” provocada sobre todo por el exceso de trabajo acumulado que acusan dada la falta de personal también en su ámbito. Esto lo refleja el estudio presentado esta mañana por el presidente del Colegio de Enfermería de Granada, Jacinto Escobar en el que se pone de manifiesto que la profesión ha llegado a un “escenario insostenible” ante el que las enfermeras van a unir fuerzas "para forzar un cambio". Escobar, refiriéndose a la falta de contratación ponía sobre la mesa un dato alarmante: “a Granada le faltan unas 2.000 enfermeras para que la ratio se equipare a la media nacional”.

Las enfermeras encuestadas han valorado en la encuesta que ha dado paso al informe cuáles son sus principales demandas y reivindicaciones de cara a la administración pública, peticiones que lidera la exigencia de una mejor ratio enfermera/paciente. En este sentido, Andalucía –con 459 enfermeras por cada 100.000 habitantes– tiene una ratio un 21,5 % inferior a la media nacional que la convierte en la segunda peor comunidad autónoma en esta clasificación sólo por detrás de Murcia, que tiene 430 enfermeras por cada 100.000 habitantes, y muy lejos de las 868, 754 y 689 que tienen respectivamente Navarra, País Vasco y Castilla y León.

Los resultados del estudio ponen también de manifiesto que las enfermeras encuestadas se muestran profundamente pesimistas en lo que respecta a su situación profesional y laboral en comparación con el resto de comunidades autónomas.

En el caso de Granada, el 87,6 % considera que su retribución es peor. Percepción muy parecida es la que se refiere a la carga de trabajo, aspecto en el que el 80,4% de las enfermeras granadinas encuestadas asegura estar en clara desventaja. Además, el 77,3 % percibe también un agravio comparativo en estabilidad en el empleo, agravio que manifiestan casi el 60% cuando se trata de reconocimiento en los centros de trabajo y oportunidades de formación.

Para Escobar, resulta imprescindible adoptar medidas inmediatas para subsanar esta situación. “Salud no puede seguir pidiendo a la profesión sanitaria mantenga estas preocupantes condiciones. Vamos a unir fuerzas con organizaciones de pacientes, sindicatos, sociedades científicas y universidad para acabar con esta situación”.