La provincia ganará en los próximos 15 años cerca de sesenta mil habitantes, hasta rozar los 990.000 en 2037, según la última proyección de población del Instituto Nacional de Estadística (INE), publicada esta semana. Sin embargo, ese aumento no vendrá de los nativos, sino que lo hará desde fuera. Así, la inmigración nacional es el único indicador, junto a la tasa de defunción, que sube en estos tres lustros en la provincia, mientras cae tanto la tasa de natalidad, como el envejecimiento de la población. 

Desglosando los datos ofrecidos por el INE, en 2036 (último año reflejado), la provincia recibirá 12.472 personas de otros puntos de la geografía nacional, lo que sumado a los 7.266 inmigrantes de fuera de España, aportará a Granada un balón de oxígenos poblacional de 19.738 personas. Por contra, en ese año dejarán la provincia 12.866 personas hacia otros municipios españoles, y 3.884 hacia el extranjero, lo que restará 16.750 granadinos menos residiendo en su tierra. 

En cuanto a géneros, la inmigración nacional será muy paritaria, sin embargo destacan ligeramente los hombres, que supondrán el 51,6% de los nuevos llegados, frente a los 48,3% de mujeres. Este dato contrasta con el panorama general que pronostica el INE, donde la Granada de dentro de 15 años tendrá más mujeres que hombres. Así, en 2037, serán 503.136 granadinas frente a las 469.765 que el organismo público cifra en la actualidad, lo que supone un crecimiento del 7,1%. Para el mismo tiempo, los granadinos crecerán un 5,7%, pasando de los 460.203 que hay en la actualidad a los 486.729. La desigualdad es aún más patente si se observa que, en la actualidad, son 9.562 mujeres más que hombres en la actualidad, mientras que dentro de quince años habrá una separación de 16.407 personas.

Por grupos de edad, la mayoría de inmigrantes nacionales se engloban en un rango de edad que va desde los 23 a los 38 años, se trata pues de gente en edad de trabajar que se traslada a la provincia en busca de oportunidades laborales. Por contra, a partir de los 67 años, el número de personas que llegan a Granada comienza a bajar paulatinamente, aunque al llegar al grupo de 99 años o más sufre un ligero repunte, pues en 2036 serán casi 99 personas las que vendrán a Granada según el INE, que se aleja así de la treintena de personas que calculaba para las edades anteriores. 

Por otro lado, el informe del INE revela que la edad media de la provincia también irá en aumento durante este periodo, pasando de los 43,3 años que marca en 2022 hasta los 46,4 que se prevé alcanzar en 2037.

Pese a todo, esta llegada de savia nueva no impedirá que la Granada de 2037 sea una Granada vieja, pues si se mantienen las tendencias demográficas actuales, subraya el INE, la población de 65 y más años llegará a suponer el 26% del total en el año 2037 y el progresivo e ininterrumpido aumento de las defunciones, siempre superior al número de nacimientos, dará lugar a un saldo vegetativo negativo durante todo el periodo proyectado. Así, en la actualidad la provincia tiene un saldo de -1,9, mientras que dentro de tres lustros esta cifra caerá hasta los -1,4. Se trata de un crecimiento respecto a la actualidad, que invitan a pensar en una mejora de la situación para el futuro, pero de momento las cifras apuntan a una población principalmente envejecida en Granada. 

Más muertes que nacimientos

Del mismo modo, la tasa de natalidad en la provincia en 2036 (último año disponible para este indicador) se situará en 8,35, mientras que la tasa de natalidad para el mismo año será de 9,7, es decir, más de un punto por encima.

Esta diferencia entre nacimientos y muertes no es nada nueva, ya al principio del curso escolar se evidenciaba la falta de nuevos alumnos en las primeras etapas de la vida escolar. Y es que en el primer semestre de este año nacieron algo más de 3.400 nuevos granadinos, una cifra muy inferior a la registrada en la posguerra, cuando vinieron al mundo 8.888 niños y niñas en algún pueblo de la provincia, lo que supone una caída del 61%.

De cumplirse las predicciones del INE, este porcentaje seguirá creciendo en el futuro. De acuerdo a las previsiones del Instituto, en 2036 (aquí se incluye el año entero y no un semestre) nacerán 8.266 personas mientras que los datos del INE de 1941 (accesibles solo en PDF) indican que vinieron al mundo 507.776 personas, lo que supone un descenso del 98%.

Pese a todo, el número de bebés seguirá creciendo en Granada. Para este este año, el INE prevé 7.043 alumbramientos, una cifra que irá creciendo paulatinamente a lo largo de los lustros hasta los ya mencionados 8.266

El lado negativo es que también subirán las defunciones durante este periodo. De esta forma, los cálculos del Instituto prevén 8.864 muertes para 2022, una cifra que seguirá creciendo hasta alcanzar hasta los 9.677 en 2036, lo que supone un crecimiento de casi el 10% para tan solo quince años. 

Un crecimiento poco disperso

En el crecimiento demográfico de la provincia  debe tenerse en cuenta, además, que no será homogéneo. Todo hace prever que se concentre en el Área Metropolitana, al menos al juzgar la hemeroteca, ya que en los últimos años los granadinos se han mudado al Cinturón y a la Costa, en detrimento de las zonas del norte, que están sufriendo un éxodo poblacional debido, entre otros factores, a la falta de recursos.

Las proyecciones de población del INE proporcionan una simulación de la población que residiría en España para los próximos años, desagregada según características demográficas básicas. Parten de la estimación de la población a 1 de enero del año en curso. Dicho estudio responde a la necesidad de disponer de una perspectiva de la posible realidad demográfica futura, actualizada según la evolución más reciente.