Granada es nombre de mujer
Escasean las mujeres ateneistas. En Granada la periodista Belén Rico es vicepresidenta del Ateneo y en Priego la catedrática del Instituto Alhambra Consuelo Aguayo es nombrada presidentaNacieron desgajados de las Sociedades Económicas de Amigos del País y regidos por hombres pero hoy en día se están abriendo al colectivo femenino
Lleva el Ateneo nombre de clara alusión femenina pues recuerda al templo de la diosa Atenea, la Minerva romana, aquélla que decían era sabia y justa. Surge de ahí esa denominación de estas asociaciones científicas, artísticas y literarias.
Los Ateneos son hijos de la Ilustración, desgajados de las antiguas Sociedades Económicas de Amigos del País y generalmente regidas por hombres. Presidentes ilustres fueron el granadino Martínez de la Rosa, Cánovas, Azaña, Unamuno, Fernando de los Ríos, etc. Daría la impresión de que los únicos con bula especial para entrar en el templo de la sabia Atenea fueran los hombres.
Pero la cosa va cambiando, sin ir más lejos esto leímos en Granada Hoy el 7 de febrero de 2010: El Ateneo de Granada eligió ayer a sus nuevos representantes… La periodista Belén Rico fue elegida vicepresidenta y desarrollará sus nuevas funciones junto a la presidenta de la Asociación de Vecinos del Albaicín Lola Boloix, que participará como tesorera.
Ateneistas de Granada son también las poetas y profesoras universitarias Erika Martínez, Milena Domínguez y Maribel Lázaro. Algo es algo; y hay ya muchas mujeres ejerciendo cargos de responsabilidad. Es el caso más cercano el nombramiento el pasado 5 de junio de la profesora Consuelo Aguayo Ruiz-Ruano, Catedrática de Filosofía del Instituto Alhambra del barrio del Zaidín, como Presidenta del recién fundado Ateneo del bellísimo pueblo cordobés de Priego.
Yo no sé quién ha sido la primera mujer presidenta de Ateneo en España; sé que el primer Ateneo fue el de Madrid, fundado en 1820, pero no figuraba ninguna mujer; conozco el caso de aquella ilustre dama, Faustina Sáez de Melgar, fundadora en 1869 del llamado Ateneo Artístico y Literario de Señoras; pero por las enseñanzas que allí se recibían, cuyo objetivo era ilustrar a las mujeres para que sus maridos no se aburrieran y las abandonaran, y por el mismo dato de titularse la presidenta como segundo apellido 'de Melgar', por estar casada con el señor Melgar, me imagino el guión.
Distinto fue el nombramiento en 1906 de Emilia Pardo Bazán como Presidenta de la Sección de Literatura del Ateneo de Madrid. Ateneistas fueron Clara Campoamor; la periodista y escritora almeriense Carmen de Burgos o la malagueña Victoria Kent que presidió la Comisión del Ateneo del Partido Radical Socialista. A partir de ahí conocemos muchos casos: Isabel Oliver es Presidenta del Ateneo Republicano Blasco Ibáñez, de Valencia; África Malo de Molina lo fue también del de Madrid; y seguro que hay una docena más.
Mujeres que van abriendo camino hacia esa institución tradicionalmente formada por hombres, como ya lo hizo Concepción Arenal o aquella primera mujer que ingresó en la Real Academia de la Lengua en febrero de 1978, la poeta cartagenera Carmen Conde, a la que siguió en 1984 la novelista Elena Quiroga.
La solera del Ateneo de Córdoba, fundado nada menos que en 1881, las huellas del antiguo Casino y la Asociación Cultural La Pandueca de Priego es lógico que proyecten su recuerdo; ahora nace este nuevo foro científico, artístico y literario en un pueblo de fuste, la patria del presidente republicano Alcalá Zamora, del escultor Álvarez Cubero, del pintor Lozano Sidro, de la soprano Carmen Serrano, del pianista Antonio López, Vicepresidente del Ateneo precisamente, etc.
Pero como granadinos muy cercanos nos hace ilusión que el nuevo Ateneo sea presidido por la prieguense Consuelo Aguayo Ruiz-Ruano, profesora en Granada, poeta y estudiosa de la obra de la veleña María Zambrano.
Larga vida tenga el nuevo foro de Priego, inspirado en el de Málaga y hermanado con el también joven Ateneo de Granada. Bienvenidas sean todas las asociaciones que velen por la proyección de la cultura en Andalucía, que buena falta nos hace. Y si están en manos de mujeres de valía pues… muy bien.
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