El nuevo equipo de gobierno del Ayuntamiento de Granada ha aprovechado un 'descuido' de la Federación de las Agencias Internacionales para el Desarrollo (AIDE) para romper la cesión con derecho a compra y recuperar la titularidad de la Casa Ágreda. Para desarrollar su idea y convertir la casa palacio del siglo XVI en un centro social, la asociación debía presentar un proyecto de construcción en el plazo máximo de seis meses. El tiempo ha expirado sin que se haya presentado ningún documento, así que el nuevo equipo, liderado por el alcalde, Paco Cuenca, se ha propuesto recuperar los derechos de superficie del inmueble y rescindir el contrato firmado por el anterior equipo de gobierno del PP. La venta de la Casa Ágreda, situada en el Albaicín y declarada Bien de Interés Cultural (BIC), puso en pie a numerosos colectivos de la ciudad, contrarios a que un edificio que en 2008 estaba valorado en 6.200.000 euros, pudiera ser adquirido por esta asociación por 1.600.000 euros, si bien se comprometían a hacer obras en el edificio por valor de casi cinco millones de euros.

La junta de gobierno local de hoy viernes aprobará el inicio del expediente de resolución del referido contrato e iniciará un período de alegaciones con la referida organización no gubernamental. Está por ver cuánto le costará a la ciudad romper dicha cesión, teniendo en cuenta que la ONG había otorgado una fianza que ronda los 250.000 euros, según explicó ayer el concejal de Urbanismo, Miguel Ángel Fernández Madrid. Ahora habrá que ver en qué medida se devuelve dicha fianza. El concejal de Urbanismo admitió ayer que posiblemente haya una parte (si no entera...) que haya que devolver y apuntó un dato a tener en cuenta: el dinero ya se ha gastado.

La reversión de la cesión de la Casa Ágreda ha sido objeto de numerosos movimientos ciudadanos que pretendían parar esta operación por ser lesiva para los granadinos y para la ciudad, que perdería así parte de su patrimonio.

Desde el equipo de gobierno del PP siempre se defendió que no se trataba de una venta sino de una cesión y que la ciudad debía aprovechar la oportunidad de que una ONG rehabilitara el edificio con una inversión de 5 millones que jamás podría acometer el Ayuntamiento con su escaso presupuesto. Finalmente una moción aprobada en pleno con los votos del PSOE, Vamos Granada e IU obligaba al Ayuntamiento a deshacer el convenio.

El alcalde de la ciudad, Paco Cuenca, no entró a valorar ayer el uso que la federación AIDE pretendía dar al edificio pero sí dejó claro que el objetivo de esta decisión del nuevo gobierno municipal es que el patrimonio histórico y cultural de la ciudad "no se venda".

El equipo de gobierno del PSOE cree que el acuerdo firmado con esa organización en el mandato del PP era "perjudicial" para la ciudad y defiende que con la rescisión del contrato, que implicará la devolución de la fianza depositada por AIDE, se defiende el interés general. Hace ahora un año, el Ayuntamiento de Granada, entonces gobernado por el PP, anunció que había otorgado los derechos de superficie de la Casa Ágreda, mandada construir por Diego de Vera Agreda y Vargas y ubicada en el histórico barrio del Albaicín, a la Federación AIDE para crear en Granada la única sede en España de la referida Federación, con uso cultural y social.

La Casa Ágreda, ubicada e la Cuesta de Santa Inés, junto a la carrera del Darro, es una de las más notables casas palaciegas construidas en Granada en el siglo XVI. A finales del siglo XIX se fundó en la Casa Ágreda por Maximiliano Fernández del Rincón, canónigo lectoral de la Catedral de Granada y luego Obispo de Teruel, el convento-colegio de la Presentación de Nuestra Señora, para enseñanza de niñas. Posteriormente la casa fue adquirida y restaurada por el Ayuntamiento en 1940 y se instaló en ella el Orfelinato o Escuela Hogar de la Divina Infantita, regido por religiosas de esta congregación.