Granada es una ciudad con un gran atractivo turístico, pero que en verano debe competir con la Costa Tropical granadina, una batalla difícil de ganar. Con el final del verano, la capital gana terreno y comienza a llenas sus hoteles. A pesar de las nefastas expectativas proyectadas para el inicio de mes, resulta que "una vez transcurridos los primeros días del mes, que siempre suelen ser peores, pero hemos constatado que tenemos una ocupación que no contábamos con ella", resalta el presidente de la Federación de Hostelería de Granada, Antonio García.

El secretario de los hosteleros en la capital incide en que "había una gran incertidumbre porque el turista nacional volvía a su destino y tenía que volver al trabajo y los niños al colegio, la incertidumbre era seria" pero la realidad es que "de una forma leve comienzan a llegar turistas extranjeros, pero el turista nacional está considerando Granada".

García explica que "durante la semana estamos en un 55, 60 por ciento y en los fines de semana llegamos el 75 por ciento, dependiendo el tipo de establecimiento, normalmente, siempre tienen más ocupación los del centro y todo apunta a que en septiembre se seguirá esta tónica"". La realidad, supera en gran medida a las previsiones sobre septiembre que eran "de un 20 por ciento de ocupación, muy bajas, así que la hemos superado", celebra García.

Respecto a septiembre del año pasado, García lo clasifica como "infinitamente mejor, porque estábamos prácticamente a cero, la diferencia es de al menos treinta puntos y había un veinte por ciento de hoteles cerrados, los fines de semana repuntaba como mundo a un treinta por ciento y se registraban pérdidas".

En la campaña de otoño García señala que "lo importante son las festividades que tenemos a la vista, el Pilar, el día de todos los Santos y la Inmaculada, esos cuatro días no salvan el año, pero van a contribuir sin ninguna duda".

Pese a lo positivo de la situación actual, el secretario de los hosteleros reflexiona que "solo se han logrado vender todas las entradas de la Alhambra en las semanas centrales de agosto, teniendo en cuenta que el aforo está al setenta y cinco por ciento, eso da una imagen de cómo está la ciudad, reactivándose poco a poco, porque antes de la pandemia era casi imposible conseguir una entrada para la Alhambra en septiembre". "Granada es un buen destino para octubre porque la gente busca el interior", explica García, e insiste en que "todo suma, la hostelería y el ocio nocturno también, lo que queremos es que no haya ningún tipo de restricción porque la vacunación va muy bien y las empresas necesitan más tiempo para desarrollar su actividad".