Granada ha sido el punto negro de las carreteras españolas este fin de semana con la muerte de dos motociclistas en sendos accidentes acaecidos en Almuñécar el sábado y en Calicasas la madrugada del domingo. De hecho, nueve de las once personas fenecidas este fin de semana en España lo hicieron en accidente de moto, y de esas nueve, dos en Granada, casi un tercio del total.

El primer deceso tuvo lugar el sábado al anochecer. Un motorista perdió la vida tras sufrir un accidente al chocar con una furgoneta en el término municipal de Almuñécar sobre las 19:40 horas, en concreto en el kilómetro 7 de la carretera A-4050, la conocida como carretera de La Cabra. Los testigos apuntaron que, tras el choque, el motorista, un hombre "muy joven", había quedado atrapado bajo una de las ruedas de la furgoneta y que falleció en el mismo lugar de choque.

Horas más tarde, a las 2:30 de la madrugada del domingo, otro varón falleció en la carretera GR-3422 a su paso por Calicasas, conocida como la del Chaparral, tras salirse de la carretera y chocar contra un olivo. En el accidente también resultó herida una mujer que iba de paquete en la motocicleta siniestrada.

El departamento de siniestralidad de la DGT, que dirige Pere Navarro, ha precisado que ocho de los accidentes se han producido en vías convencionales y tres en autopistas o autovías. Además, entre los siniestros ha habido cinco salidas de la vía y cinco colisiones. Los siniestros de este fin de semana han tenido lugar en Mojácar (Almería), Navatalgordo (Ávila), Santa María del Camí (Baleares), Caldes de Montbui (Barcelona), Almuñécar y Calicasas (Granada), Rentería (Guipúzcoa), Alcalá la Real (Jaén), Málaga (Málaga), Villaverde del Rio (Sevilla), Valencia (Valencia).

Finalmente, en el acumulado anual hasta el 8 de octubre se llevan contabilizados 871 fallecidos, de los cuales 29 han muerto en lo que va de octubre. Hasta el 31 de octubre de 2022 un total de 949 personas habían fallecido en las carreteras españolas.

Campaña

Precisamente en la mañana de este lunes, la Dirección General de Tráfico llevará a cabo una nueva campaña específica de vigilancia que, en esta ocasión, pone el foco en las distracciones en la conducción. Voluntarios con lesión medular de ASPAYM Granada colaboran un año más en esta campaña concienciando con su presencia de las consecuencias y secuelas irreversibles que puede tener una pequeña distracción al volante. Esta campaña durará hasta el próximo día 15.

Este tipo de campañas "son imprescindibles para alertar de los riesgos que implica la conducción distraída o desatenta puesto que ésta se mantiene como la primera causa concurrente más frecuente en los siniestros de tráfico desde 2017", según ha señalado la subdelegada del Gobierno en Granada, Inmaculada López Calahorro, quien, junto al jefe provincial de Tráfico, José Vico; el jefe del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil, José Artero Moreno y miembros de la Asociación ASPAYM Granada, han estado presentes en el inicio de esta campaña.

El 31% de los accidentes con víctimas mortales tiene su principal factor en la distracción, ocasionada principalmente por el uso indebido del teléfono móvil, navegadores GPS u otros dispositivos. De hecho, el uso del teléfono móvil multiplica por cuatro el riesgo de accidente, equiparándolo al de conducir bajo los efectos del alcohol. Según el Observatorio Nacional de Seguridad Vial, tras minuto y medio de conversación el conductor deja de percibir el 40% de las señales, y además su ritmo cardíaco se acelera y tarda más en reaccionar.

El Observatorio Europeo de Seguridad Vial (European Road Safety Observatory ERSO) recoge, en el informe monográfico sobre distracciones al volante, los resultados de diversos estudios basados en la observación directa de los conductores.

En él se recoge que la prevalencia del uso del teléfono móvil mientras se conduce en coche en Europa admitida por los conductores es de del 48% para el uso de dispositivos con manos libres y, lo que es más preocupante, del 29% para hablar por un teléfono móvil sin manos libres y del 24% para leer mensajes de texto o comprobar las redes sociales.

En este sentido, el informe refleja también cómo las acciones que requieren apartar la vista de la carretera o realizar tareas manuales tienen mayor impacto tanto en el comportamiento al volante como en el riesgo de colisión, siendo esta 3,6 veces mayor en el caso de hablar sin utilizar el manos libre, 6 veces mayor al escribir un mensaje y 12 veces mayor en caso de marcar un número manualmente.

Por todo esto, dado que la presencia del móvil en la conducción se ha incrementado de manera exponencial en los últimos años, provocando infinidad de accidentes, la reforma de la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial que entró en vigor en marzo de 2022 incrementó de 3 a 6 los puntos a detraer por conducir sujetando con la mano dispositivos de telefonía móvil y una multa de 200 euros.