Guadix cierra un tanatorio que trabajaba sin licencia

Guadix cuenta desde la semana pasada con un solo tanatorio, el ubicado junto al Cementerio San José de la localidad, que pertenece a servicios funerarios La Nacional. Esta empresa tiene acotada la entrada a su tanatorio y las demás funerarias de la ciudad se servían del tanatorio de una residencia de ancianos. Pero una denuncia presentada ante el Ayuntamiento de Guadix por La Nacional ha causado el cierre temporal del tanatorio de la residencia de ancianos Santa Teresa de Jornet en Guadix. Esta decisión ha perjudicado a dos funerarias accitanas, Funeacci S.L. hijos de Ángel Rodríguez y Funeraria Olmos, ya que era el lugar que elegían para poder ofrecer a las familias un lugar para velar a sus difuntos.

Según cuenta uno de los hijos de Ángel Rodríguez, José María Rodríguez, de Funeacci, "el tanatorio de la residencia Santa Teresa de Jornet fue remodelado por las monjas de la residencia en agosto de 2011, carecía de la licencia correspondiente de tanatorio, que nunca se le había exigido como tal en tantos y tantos años que llevan ofreciendo ese servicio".

El Ayuntamiento de Guadix, tras la denuncia de La Nacional, ha limitado la función del tanatorio exclusivamente para los decesos que ocurran en la residencia. Según asegura José María Rodríguez, "esta medida provoca un perjuicio a todas las funerarias que en Guadix carecen de tanatorio y se servían de dicho lugar ofreciendo un donativo a la residencia por los servicios prestados. Una de las consecuencias es que la familia que expresamente quiera velar a un ser querido en tanatorio, que es la gran mayoría, no podrá elegir la funeraria que por calidad, diferenciación del producto y precio le satisfaga".

Según las fuentes consultadas, el Ayuntamiento de Guadix ante la denuncia inmediatamente procedió a cerrar el tanatorio y ya no se puede velar a nadie en la residencia Santa Teresa de Jornet, hasta que no regularice la situación. Precisamente, fueron las monjas de la residencia las que se dirigieron a las funerarias accitanas afectadas para hacerles saber que, desde ese momento, está prohibido llevar difuntos allí. Según una de las funerarias afectadas, esta licencia de tanatorio no se le ha pedido nunca en los 30 años que lleva funcionando, e inclusive La Nacional también ha velado difuntos en la residencia.

Las fuentes consultadas de una de las funerarias afectadas por esta situación, se quejan de que La Nacional "quiere el monopolio, sólo trabajar ellos y aplicar sus tarifas abusivas y cualquier cliente las puede comparar con otras funerarias. A partir de eso, interpelan un expediente informativo al Ayuntamiento para que presenten toda la documentación relativa a ese tanatorio. Las monjas sólo lo tienen para sus servicios y ellas para hacer un favor al pueblo de Guadix, meten otros difuntos allí a cambio de un donativo y esperemos que esto se solucione. Creemos que se va a legalizar y nosotros no podemos presentar nada, ni intervenir porque esto es algo entre la residencia y el Ayuntamiento". Sobre los perjuicios económicos, una de las funerarias afectada piensa que "nos van a traer unas consecuencias malísimas. La mala intención es que no quieren que nadie trabaje en esta ciudad excepto ellos, porque no dan cabida dentro de su tanatorio a ninguna funeraria que venga incluso de fuera. Solamente quieren imponer sus tarifas demoledoras y que tengan que acudir allí por tripas. Ahora, nos encontramos con que no podemos trabajar con difuntos que vayan al tanatorio. Eso supone una pérdida económica tanto para las monjas como para nosotros impredecible, porque no se sabe el número de servicios que pueden venir", se quejaban en esta funeraria.

Los donativos que, hasta el momento, las funerarias accitanas daban a las monjas de la residencia Santa Teresa de Jornet iban destinados para el mantenimiento del tanatorio. Según una funeraria afectada, "por fortuna, todavía no nos ha venido ninguna familia que quisiera velarlo en la residencia. Hasta que no se solucione la cosa, no hay nada que hacer. Con el Ayuntamiento nosotros no podemos influir y esperemos que se presente la documentación necesaria para que se legalice. Yo sé que el Ayuntamiento tiene mucha voluntad y espero que en esta semana se quede resuelto. Esto ha salido ahora porque en agosto se reformó el tanatorio de la residencia y es ahora cuando a la gente le gusta subir allí. Aquello ha quedado muy bien y eso les hace daño. Porque la diferencia económica entre ellos y las otras funerarias de la ciudad estarían entre los 1.500 y 2.000 euros por un servicio medio", finalizan desde esta funeraria.