El IPC mantiene su escalada: los granadinos pagan ahora un 1,9% más que hace un año
Granada cierra el mes de marzo con el mayor incremento interanual de los precios desde el año 2013
Lo que más sube, la luz
Este año, la cuesta de enero se ha hecho todavía más larga, extendiéndose hasta los meses de febrero y marzo. El IPC no da respiro, y al contrario de lo que ha sucedido en el conjunto nacional, marzo no ha hecho más que profundizar en la escalada de los precios que se inició a principios de año. La cesta de la compra -una cesta que incluye desde la alimentación hasta el pago del alquiler y la hipoteca- es ahora un 1,9% más cara que hace justo un año, cuando los precios todavía estaban marcados por el signo negativo de la deflación.
El encarecimiento de los gastos familiares no solo resulta de la comparación interanual, sino que en Granada -al contrario de lo que ha sucedido en el conjunto del territorio nacional- los precios también son ahora más caros que el mes pasado. En concreto, según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el IPC se ha elevado un 0,3% respecto al mes de marzo, lo que significa que la bajada del precio de la vivienda, el agua, la electricidad, el gas y otros combustibles (-1,6%) ha sido suficiente para compensar la subida que han registrado otros elementos como el vestido y el calzado (la finalización de las rebajas ha supuesto un incremento del 8,2%).
En términos interanuales, la subida de los precios que se ha registrado en el mes de marzo marca una enorme distancia con los años anteriores: mientras que los precios suben ahora un 1,9%, en 2016 se redujeron un 0,8%, en 2015 lo hicieron un 0,9% y en 2014, se contrajeron un 0,5%. De hecho, hay que remontarse hasta marzo de 2013 para encontrar una subida interanual de precios más elevada que la de este año. Por aquel entonces, el IPC se elevó un 2,6%, siguiendo una tendencia que también se registró en los ejercicios 2012, 2011 y 2010.
Los precios que más se alejan de los del año pasado son los de la electricidad, el gas y los combustibles, que todavía son un 11,8% más altos que los que se registraron en marzo de 2016. También se han elevado considerablemente los costes de la adquisición de vehículos (un 3,6%), de la utilización de vehículos personales (8,4%) y los seguros (4,2%).
En el otro lado de la balanza, hay productos como las bebidas no alcohólicas (-3,9%), los efectos personales (-5,8%), los equipos de telefonía (-6,3%), los equipos audiovisuales (-6,5%) o los grandes bienes duraderos para ocio y cultura (-8,1%) que sí que han contribuido a aliviar el gasto que se ven obligados a realizar las familias granadinas.
A la vista del comportamiento reiterado del IPC, el secretario general de UGT de Granada, Juan Francisco Martín, volvió a reclamar ayer la necesidad de aumentar los salarios, de forma que se garantice que los trabajadores no sigan perdiendo poder adquisitivo, haciendo llegar a los hogares "los frutos del crecimiento económico". Porque, según Martín, de momento el reparto de la recuperación está siendo "desequilibrado" y no está llegando a los ciudadanos.
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