La Iglesia dará un código común para el funcionamiento de las cofradías

Las normas de régimen interno y los estatutos de las cofradías regulan el funcionamiento de las diferentes corporaciones y cómo tienen que desarrollar su actividad. Normas que difieren en cada hermandad y más aún por provincias. Después están las federaciones de cofradías o los consejos, que también tienen su estatuto marco de funcionamiento. Y por encima, la Iglesia, con sus propias normas y protocolos. Una diversidad que hace que en cada provincia haya diferentes funcionamientos para un mismo asunto y que haya cuestiones que por específicas se salgan de esa regulación.

Para unificar criterios, los obispos de Andalucía trabajan en la elaboración de unas nuevas Normas Diocesanas que serán de obligado cumplimiento para todas las corporaciones de Andalucía. Normas que regularán el funcionamiento de las cofradías y que controlarán, por ejemplo, asuntos como las salidas extraordinarias, las coronaciones canónicas, los procesos electorales de las corporaciones o los requisitos para ser hermano mayor o entrar en una junta de gobierno.

Los trabajos para la elaboración de las normas los avanzó el arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo, hace dos días. En una entrevista a Diario de Sevilla aseguró que, aunque todavía se tiene que dilucidar en la próxima asamblea de obispos del Sur, ya hay un obispo que está trabajando en un borrador. "Hay bastante homogeneidad en los que respecta a las hermandades, por eso es importante que los obispos demos normas homogéneas para todas estas instituciones.

Desde el Arzobispado de Granada aseguran que este asunto es interno de los obispos y que no se posee más información. Con todo, este periódico ha podido conocer que es el obispo de Huelva quien está realizando ese borrador como responsable de los asuntos de piedad popular. Este documento estaría ya muy avanzado y se podría debatir en la próxima reunión de obispos de Odisur, que se celebrará en mayo, o en las sucesivas.

Con unas normas comunes se tendrían que acatar en todas las iglesias de Andalucía, como otras ya dictadas sobre otros asuntos, como el uso extralitúrgico de los templos.