Los millennials granadinos, los jóvenes nacidos entre los años 1980 y 1999 que ahora comienzan a asumir responsabilidades en la sociedad, poco tienen en común en gustos, valores y principios con las anteriores generaciones que crecieron y se desarrollaron en la provincia. Son personas alejadas de las convenciones de la sociedad en la que viven y se mueven en un océano revuelto de ideas en el que tratan de ser entendidos por quienes, a veces, les dan la espalda.

Entre todo este caos en el que conviven surgen voces que funcionan como altavoz en las redes sociales para hacerse oír y que se convierten en líderes improvisados (o no tan improvisados) del colectivo. Ellos son los máximos representantes de ideas, gustos, pensamientos, cultura o productos, sin importar ninguna categorización. Son los influencers, esas personas normalmente extrovertidas que se lanzan a internet a través de cualquier plataforma en busca de gente que comparta sus ideas y a las que hacer llegar su producción y su mensaje personal.

La temática es tan variada como los propios granadinos a los que llegan. Los hay que hablan sobre su día a día, sobre "enseñanzas de la vida" (queriendo ser la voz de la experiencia), cultura y música, videojuegos, animales, monólogos, tops (listas numeradas de todo tipo), ciencia ficción e, incluso, curiosidades de todo tipo.

Según el octavo estudio de redes sociales del IAB (Interactive Advertising Bureau) de abril de este mismo año, el 86% de las personas que navegan por internet usan de forma activa las redes sociales y algo más de la mitad de ellos (un 53%) confía en las opiniones de estos líderes de opinión. Ya sea a la hora de comprar o consumir productos, como para cambiar su pensamiento o forma de comportamiento.

Dentro de este gran movimiento a nivel mundial existe una decena de granadinos que se han convertido en embajadores de su ciudad gracias a su trabajo y a su forma de entender la vida, sin importar la temática sobre la que creen su contenido.

El primer caso lo encontramos en la red social Twitter con los hermanos Salazar, que se encargan de mostrar al mundo qué es la 'malafollá granaína' en sus múltiples variantes. Su perfil @mfgranaina cuenta con más de 91.000 seguidores, entre los que se cuentan granadinos (tanto en la provincia como fuera de ella), visitantes que se enamoran de la ciudad y todo aquel que quiera saber algo más sobre Granada y sus costumbres. Ellos, además, están detrás del famoso videoclip Granaino Style, una parodia de la canción del rapero PSY en la que mostraban lo más típico de la ciudad. Y aunque en algunas ocasiones la critiquen, saben que "como Graná, ná".

Otro granadino que triunfa en las redes sociales es Juan Bermúdez, conocido en internet como Kaos. En su canal de Youtube Estudio Katastrófico realiza vídeos sobre animación, dibujo y vlogs (vídeo blogs). Él mismo se define en sus redes sociales como "Dibujante y, para colmo, youtuber". Kaos empezó como muchos otros creadores, subiendo vídeos como hobby. Empezó con vlogs en los que contaba su vida para después mostrar a sus más de 358.000 seguidores su vocación: animación y, sobre todo, dibujo. Estudió Bellas Artes en la Universidad de Granada y actualmente se encuentra residiendo en Madrid y dibujando. Este proceso le ha llevado a ilustrar un cómic creado por otra youtuber andaluza, Adelita Power. El cómic Adelita Power: The Origins, es otra muestra más de su magnífico trabajo.

Kowai Nana. Podría sonar a japonés, y de hecho lo es, pero también es el nombre en las redes de otra youtuber granadina. Con 223.000 seguidores, Nana Medina lanza contenido a sus "terribles", es decir, a sus seguidores (la traducción al castellano de kowai es terrible). Antes de crear este canal, Nana compartía vídeos con su compañero Germán García en otro canal de origen granadino, Ragger Coffee, pero de un contenido distinto. Ella creó Kowai Nana para hablar sobre maquillaje, tatuajes, peinados, unboxings (abrir compras frente a cámara, mostrarlas y probarlas) vlogs, viajes y más.

Estos son los más destacados, pero podemos encontrar mas ejemplos en la plataforma YouTube de canales granadinos con muchísima influencia en su sector. Otros dos ejemplos podrían ser los siguientes: el ya mencionado Ragger Coffee, de temática cinéfila, tops, historias de internet y cosas frikis. De lunes a viernes, como si fuera un noticiario, se toman un café delante de la cámara y hablan de esos temas. Cuenta con 970 vídeos en su canal (y subiendo) y más de 103.000 personas lo siguen.

Y por último el canal de la granadina Raquel Eugenio, con vídeos musicales y 'covers' (canciones reinterpretadas en acústico por un cantante distinto al original). Su interpretación de Hasta que el cuerpo aguante de Mago de Öz suma casi 800.000 reproducciones.

Estos son sólo algunos ejemplos de los nuevos líderes de opinión granadinos. Jóvenes con inquietudes y opiniones que son seguidas por miles de personas. Y todo gracias a una asequible cámara, un teclado y una conexión a internet.