La Inspección de Trabajo ha pedido al Servicio Andaluz de Salud (SAS) que subsane el exceso de calor que sufre la plantilla que trabaja en el almacén central provincial de Atarfe que opera como Plataforma Logística Sanitaria de Andalucía Oriental, donde se registran temperaturas superiores a los 30 grados en verano y de hasta -1 en invierno, según las mediciones realizadas por los delegados de Prevención de Riesgos del CSIF, sindicato que ha denunciado ante Inspección la situación de este centro.

Este centro de trabajo, trasladado desde hace un año a una nave de Atarfe, es el encargado de abastecer de material sanitario y de oficina a las áreas de gestión sanitaria Nordeste y Sur, los distritos sanitarios Granada y Metropolitano y los hospitales de la provincia, así como del resto de la zona Oriental de Andalucía.

"La necesidad de ampliar la zona de almacenaje de la plataforma logística para dar cabida al material propio del Covid y de una cámara frigorífica para las vacunas hizo necesario este cambio de emplazamiento, pero no se tuvieron en cuenta determinadas medidas de salud y seguridad para la plantilla en cuanto a confort y estrés térmico”, ha informado la responsable de Sanidad de CSIF Granada, Matilde Núñez.

Núñez ha subrayado que tanto en la zona de administración y expedición de pedidos como en el almacén la temperatura media, especialmente con olas de calor como ahora, supera los 30 grados, una medición que no se ajusta al rango de temperatura establecido en la normativa dentro de las condiciones mínimas de seguridad y salud en los lugares de trabajo.

Según CSIF, la inspección de Trabajo ya ha exigido al SAS que adopte medidas para acabar con la exposición de la plantilla a temperaturas extremas para cumplir con unas condiciones mínimas de seguridad y salud en el puesto de trabajo.

Hasta el momento, la administración sanitaria está trabajando en la ubicación de una cubierta en el almacén para “mitigar” las temperaturas, trabajos que no han finalizado