Granada

Jesús Rodríguez Alcázar, nuevo decano de los jueces de Granada

  • Es consciente de que desempeñará el cargo en una época muy difícil, pero asume su nueva misión "con optimismo y compromiso"

Con 30 votos a favor y cuatro en blanco, Jesús Rodríguez Alcázar, magistrado del Juzgado de lo Social 1 de la capital, fue respaldado ayer por sus compañeros como nuevo juez decano del Partido Judicial de Granada, aunque su nombramiento no se hará efectivo hasta que no salga publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE), lo cual sucederá previsiblemente en septiembre.

Mientras tanto, seguirá al frente del Decanato de los juzgados de Granada, aunque "en funciones", el magistrado Francisco Sánchez Gálvez, titular del Juzgado de Primera Instancia 11 de la ciudad, que no se ha presentado a la reelección por motivos "estrictamente profesionales". Y es que tiene previsto concursar a una plaza en una de las secciones civiles de la Audiencia Provincial de Granada y, ante la posibilidad de ser renovado en el puesto, no quería dejar bruscamente el Decanato.

Tras la votación, en declaraciones a Granada Hoy, Rodríguez Alcázar reconoció que desempeñará el cargo en "una época muy difícil", en la que todos los juzgados están soportando "una carga de trabajo muy importante y con pocos visos de que se vayan a crear nuevas unidades judiciales", una situación a la que hay que sumar los problemas relacionados con los medios materiales y los edificios judiciales. "En estos cuatro años, no obstante, tendré que intentar que, en la medida de lo posible, las condiciones en las que trabajamos los jueces y el resto de personas que integran la Administración de Justicia sean las más adecuadas y dignas posibles para poder dar un buen servicio a los ciudadanos, que es de lo que se trata", subrayó.

Rodríguez Alcázar, granadino y perteneciente a la asociación Jueces para la Democracia, decidió concurrir a las elecciones a decano -su candidatura ha sido la única- para tratar de "contribuir a una mejora de la situación de los juzgados", así como para "trabajar por los compañeros", una misión que, pese al contexto, afronta "con optimismo y compromiso".

El nuevo decano cree que si la etapa de su antecesor ha estado marcada por las protestas contra las reformas del Ministerio de Alberto Ruiz-Gallardón, desde el punto de vista de la política judicial general, los cuatro años que le esperan "parece que van a ser también bastante complicados". Así, recordó que la reforma del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) se acaba de aprobar y hay en trámite un proceso para la cobertura de las plazas de vocales, existiendo ya asociaciones que han manifestado su intención de no participar en el mismo, pues entienden que ese proceso no responde a una mínima garantía para preservar la independencia judicial. Esto, como subrayó, supone que "a corto plazo ya exista un frente abierto de cierto enfrentamiento con el Ministerio". Luego hay otras reformas pendientes, como la de la instrucción de los procesos y si se hacen cargo finalmente de ella los fiscales o la modificación de la planta judicial, que también tienen mucha relevancia para el colectivo y que, como vaticinó, darán lugar a reacciones en los próximos meses en función de cómo se desarrollen los acontecimientos.

En cuanto a los efectos de la crisis en los juzgados y en concreto en la jurisdicción a la que él pertenece, admitió que está siendo "difícil" afrontar el volumen de asuntos que desde hace cinco años aterrizan en los juzgados que conocen los litigios de naturaleza laboral, a la vez que puso de relieve que, en general, los jueces no son ajenos a la realidad social que les rodea, "somos -dijo- conscientes de los problemas que hay de vivienda y de trabajo y aplicamos la ley siendo sensibles a todo ello".

Rodríguez Alcázar quiso agradecer a Sánchez Gálvez su labor al frente del Decanato durante los últimos cuatro años, pues "ha sido un excelente decano, ha trabajado muchísimo por todos nosotros y ha dejado el listón muy alto". Él intentará "seguir su línea".

Por su parte, Sánchez Gálvez valoró que haya alguien "que dé el paso de comprometerse a ser decano y que además lo haga en las condiciones que toca hacerlo en Granada: compatibilizando su labor jurisdiccional con los problemas que plantean 51 juzgados". En cuanto al balance de su etapa, dijo que su esfuerzo ha sido "intenso" y orientado a que el servicio se deteriorase lo menos posible, dado que la crisis ha multiplicado el trabajo y no ha habido un aumento de la planta judicial. Asimismo, ha trabajado "por preservar la dignidad, la independencia judicial y la libertad de criterio" de sus compañeros.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios